Zacatecas.- El obispo de la diócesis zacatecana, Sigifredo Noriega Barceló, consideró que el origen de la pobreza no es la falta de recursos, sino la desigualdad con que se reparten las riquezas en el mundo y consideró ético el llamado del Papa Francisco en cuanto a la crisis europea.
En ese tenor, expuso que la tarea de los expertos en economía sería presentar un programa que mejore la distribución de recursos entre la población, “con valores detrás de la economía”.
“Riqueza hay, nada más parece que no hemos querido o no hemos sabido cómo partirlo, parte de la justicia es la distribución, pero para distribuir hay que producir, por lo cual el llamado del santo padre es ético”, detalló.
Detalló que el recién nombrado Papa, escribió en su cuenta de twitter que “en este periodo de crisis, es importante no cerrarse en sí mismos sino abrirse, estar atentos al otro”.
Noriega Barceló, afirmó que la economía “por sí misma es una ciencia neutra”, y que los valores que dan los especialistas y consumidores afectan a la distribución equitativa de la riqueza.
Abundó que debiera contemplarse el tema de la ecología, pues “no podemos acabarnos lo que les corresponde a las generaciones futuras y debemos tener una responsabilidad compartida en todos los sectores sociales”, declaró.
Añadió que la Iglesia siempre ha trabajado en mejorar las condiciones de los pobres, apoyando a las personas que sufren hambre; aunque aclaró que hay distintos grados de hambre que deben resolverse, “no sólo la física”.
“La Iglesia siempre ha atendido al pobre, eso no es nuevo, y ahí es donde se verá la calidad de nuestra fe”, externó el Obispo.
También afirmó que la Iglesia Católica no apoyará a ningún candidato en las próximas elecciones que renovará a los 58 ayuntamientos y las 30 curules del Congreso estatal, por lo cual advirtió que “es un prejuicio el que se diga que apoyan a algún partido político”.
Indicó que esto lo deben saber los sacerdotes desde que entran al seminario, por lo cual no haría una petición oficial en ese tenor.
“Saben que somos factores de cambio, y allá en el fondo de su conciencia podrán apoyar a algún partido, pero es a nivel individual, además las leyes de México son claras y hasta punitivas si se dieran estas circunstancias”, externó el prelado sonorense.
“La Iglesia Católica no apoya a ningún partido, porque estos parten y nosotros buscamos la unidad; esto no evita que cada ciudadano tenga sus preferencias partidistas, en la conciencia de las personas está la elección,la Iglesia no tiene ningún partido, va más allá de ellos”, manifestó.