LAS VÍCTIMAS QUE NO CUENTAN
Qué tan grave estará la crisis de desapariciones en Zacatecas que desde otras entidades protestan para que en este estado alguien ponga orden. El año inició con la tragedia de los colotlenses que fueron asesinados en una carretera de Jerez, lo que desató manifestaciones tanto en Jalisco como en tierras zacatecanas. Ahora el reclamo por las carreteras sin ley llegó al Estado de México. A cuatro chatarreros de aquella entidad se les perdió el rastro aquí y, como cuestionaron sus familias, “¿qué está pasando en Zacatecas?”. A ver quién les responde. Lo que se sabe es que en 2023 van 432 personas reportadas como desaparecidas. En medio año, la cifra está por alcanzar las 507 víctimas registradas en 2022, según el Rnpdno. Pero esos no son números que presuman en la Mesa Estatal de Construcción de Paz.
DE A SOLISTA
Hasta los más venenosos le reconocen al diputado Ernesto González las buenas intenciones de sus propuestas en seguridad, sobre todo al considerar que la LXIV (64) Legislatura es mejor conocida por exhortativa que por propositiva. Sin embargo, llamó la atención que el legislador se aventó solo para presentar su proyecto, que incluye la creación de una guardia estatal única y vetar a los medios de comunicación que toleren música como narcocorridos. Unos dicen que González Romo no quería que ningún otro se colgara de sus iniciativas, por ejemplo, Armando Delgadillo, quien ha tenido pocos intentos que hayan acabado bien. Otros recuerdan que Ernesto no es santo de la devoción de la Nueva Gobernanza, aun cuando se trate del “tema de temas”, del que la bancada morenista no hace más que rehuir. Por cierto, parece que González no se quiere pelear con los magistrados, al menos con los actuales, pues su otra idea de quitarles los haberes de retiro o pensiones sería solo a los que entren al tribunal después de que se apruebe su ley.
NEPOTISMO
SIN INFLUENCIAS
Israel Chávez, líder del SUTSEMOP, admite que sigue vigente un acuerdo para que la burocracia del Poder Legislativo pueda heredar las plazas, en un acto descarado de nepotismo, pero convenido. Sin embargo, hace tiempo que los diputados le han dado la vuelta a lo convenido aunque también ellos gocen de las mañas del nepotismo. Recientemente se jubilaron 16 trabajadores. Se les ofreció un bono de retiro, condicionado a renunciar a ese beneficio y 15 aceptaron contentos. Solo una trabajadora, de nombre Josefina, exigió cederle su plaza a su hijo, pero no le han dado respuesta. Se dice que Higinio Estrella, delegado sindical, busca frenar las contrataciones de los hijos de quienes le caen mal, mientras que el diputado José Luis Figueroa ya quiere frenar ese tipo de prácticas. Al menos, comentan en los pasillos, ellos ya no inflan la nómina, a diferencia de los legisladores y su larga cola de “asesores”.
SE LE ACABÓ
LA PROTECCIÓN
Uno de los que incurrió en nepotismo fue el también contratista Lolo Hernández, diputado de la pasada Legislatura. Acomodó a su hermano Érick, lo dejó basificado y todo, pero cuando al petista se le acabó a su ciclo, “castigaron” a su pariente asignándole tareas de guardia de seguridad. Lolo protestó: “¡Quítenlo de ahí de inmediato!”. La legisladora Ana Luisa del Muro llegó al rescate y lo acomodó en otra función, pero luego de un tiempo a Érick lo volvieron a poner de vigilante. Total, dicen, el ofendido ya ni es diputado y dicen que, como el tío Lolo…
CRISIS EN LA SAMA
En el equipo de Saúl Monreal deben estar desesperados. No avanza el proyecto del relleno sanitario para Fresnillo y ya las víboras advierten que está pasando algo muy raro en la SAMA. Los ponzoñosos hablan de un supuesto extravío de expedientes en la dependencia estatal y que el tema estaría en proceso de investigación. Mientras tanto, los cambios en la secretaría aumentan las grillas y las especulaciones. Dicen que ya tronaron a Alejandro Solís, quien fuera subsecretario, y hace unos días sacó sus tiliches. Después de dedicarle más de tres décadas a los temas de medio ambiente, lo habrían corrido el 5 de junio, precisamente el Día Mundial del Medio Ambiente. Sucumbió al veneno que le arrojaron. Antes de eso, Juan Antonio Rangel, quien ocupaba otra subsecretaría, ya se había largado y después se acomodó en el Tec de Jerez.