“EL CHANGARRO” DE MARIBEL
Cuando Maribel Villalpando llegó al “changarro” de la Secretaría de Educación, en octubre del año antepasado, había unos 25 mil burócratas en la dependencia: 19 mil 500 profes y 5 mil 500 administrativos. Actualmente la secretaría tiene poco más de 26 mil trabajadores. La mayoría entró por recomendaciones de La Secta y la propia Maribel, incluyendo a su yerno Ángel Said Escobedo, jefe de Recursos Materiales, de quien pretenden no documentar el nepotismo porque los datos familiares no vienen en los expedientes. ¿Le dirán eso al auditor Raúl Brito? Hoy Villalpando tiene que comparecer y entre los cabildeos para que los diputados no sean tan duros con ella, algunos valoran simplemente no presentarse a la sesión. Ahora los legisladores van a aplicar la que Maribel hace un año.
LOS PROTEGIDOS
Maribel quiso hacer subsecretario a su sensei Honorio Jiménez, pero solo le permitieron que fuera director del CAM. Otro de sus consentidos es su sobrino Fernando Villalpando junior, muy buen elemento, pero para el futbol. Jugó en equipos profesionales, pero su tía lo sacó de las canchas para hacerlo jurídico y “el que manda” en la Politécnica de Juchipila. Ojalá Maribel estuviera en la directiva del Real Madrid, desearía el sobrino. Como él, los demás consentidos y protegidos, como Lucero Aguilera, de Recursos Humanos; Clara Verónica Delgado, del despacho, y Rigoberto Castillo, el jurídico, están en la incertidumbre de no encajar en los planes del relevo que se avecina. Dicen los lengua bífida que Villalpando ya ni siquiera está a gusto en la secretaría, pues se la ha pasado entre grillas y reproches en el gabinete.
EL QUE ASOMA LA CABEZA…
Rodrigo Reyes se echó varios rounds en su comparecencia. Y uno de los más duros fue Enrique Laviada, quien lo tachó de “farsante” y le recriminó la baja aprobación del gobierno, “cuyas decisiones se toman en la delegación del Malestar”. Rodrigo le recordó a Laviada que llegó a su curul gracias a Morena, partido al que ahora critica. Gran parte de los reclamos no solo fueron contra el funcionario, sino contra la Nueva Gobernanza en general, pero como dijo la diputada Karla Valdez: le tocan los trancazos al que asoma la cabeza. Este martes, se evidenció mucho trabajo pendiente en la Secretaría General de Gobierno, como una mesa para atender el problema del desplazamiento forzado y la integración de un comité para prevención. Aun así, Reyes jura que encontró una dependencia en orden, tras el paso de Gabriela Pinedo. La diputada acusó “mentiras malintencionadas” que buscan rupturas. Y se echaron miradas… en las curules de Morena.
PLAN CON MAÑA
Un grupo de burócratas de la Legislatura, del edificio alterno en Sierra de Álica, paró labores ayer por la mañana para exigir seguridad. A uno de los trabajadores le robaron una moto que tenía estacionada afuera. Y en el mitote, entre los mismos manifestantes confrontaron a compañeros que recién llegaban. “Checas, pero te sales rápido”, les reclamaban. Para apagar el fuego llegó la diputada Gaby Basurto. “La mayoría tiene mi teléfono, pudieron directamente hablarme”, dijo. Pero luego se dio cuenta que el mitote también era plan con maña. Varios funcionarios gandallas, vinculados al jurídico del Congreso, José Luis de Ávila, pasaron de las exigencias de seguridad a las de aumento salarial. Saben que hay quejas por su baja productividad, pero las altas demandas no las dejan. Y lograron que les prometieran una reunión para la próxima semana.
OTRA DE VIOLENCIA
La ex tesorera de Pinos, Adilene Lugo, podría recurrir a las acusaciones de violencia de género por el pleito que tiene con el alcalde Omar Téllez. A la funcionaria la destituyeron y encima le iniciaron un procedimiento. Y para evitar que se defendiera con la presentación de documentos, cambiaron la chapa de su oficina y ya no pudo entrar.
Entre los aspirantes a participar a la elección del 24, una fracción morenista, ajena al grupo de La Secta, ya da por hecho que Julia Olguín será candidata a diputada federal y que va a ganar. En esos reacomodos y “unificaciones”, ya hasta la síndico de Zacatecas, Ruth Calderón, que no tenía mucha relación con La Secta, le hace promoción a La Súper Malvada, más por consigna que por convicción.