Zacatecas.- Para muchos es uno de los trabajos más ingratos, para otros, es una bendición tener un empleo y dignificar a la gente, como Norma Alicia Rodríguez Jacobo, quien mantiene a su familia dedicando su tiempo a barrer las calles del Centro Histórico.
Con el rostro sonriente y una actitud positiva, Norma se encarga de hacer que la ciudad luzca siempre limpia y en orden, tarea que se vuelve más difícil cuando personas descuidadas “abandonan su basura en cualquier parte”.
El empleo, conocido como Hormiguitas, no es tarea fácil, “se trata de un trabajo cansado andar de arriba abajo y de un lado a otro recogiendo basura, con lluvia, con sol o con los fuertes vientos que hace en Zacatecas”.
Una escoba y un recogedor de aluminio han sido los compañeros de Norma desde hace tres años, todos los días desde las 14 hasta las 21 horas.
Cuando puede tomar unos segundos para descansar, son inmensamente valorados por la Hormiguita, quien en ocasiones escucha comentarios despectivos hacia su oficio, mismos a los que no les toma importancia.
Pasa el día, y con él, el sol pierde su intensidad, aunque el trabajo se vuelve menos pesado, no hay razón para detenerse o salir antes de trabajar, a diario la gente tira desperdicios que es su misión recolectar.
Entre la basura, Norma rescata algunos tesoros, los más valiosos son las latas de aluminio, que una vez que las vende a los recicladores, resultan ser un excelente complemento para los gastos.
Con 46 años, la mujer mantiene a su familia, apoyada por su esposo con quien ha trabajado en equipo desde hace 20 años para cuidar y sacar adelante a sus dos hijos.