Zacatecas.- Especialistas en accesibilidad urbana y derechos de las personas con discapacidad coincidieron en que en Zacatecas no se cumplen los lineamientos para facilitar la movilidad de quienes integran este sector.
Este jueves, Janett Jiménez Santos, arquitecta especialista en movilidad urbana egresada del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), impartió la conferencia Inclusión a través del Diseño Universal, en las instalaciones locales de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).
La Comisión de Derechos Humanos del Estado de Zacatecas (CDHEZ) organizó el evento, con el objetivo de promover el respeto a los derechos humanos y la inclusión de personas con discapacidad.
En su ponencia, Jiménez Santos afirmó que el estado carece de infraestructura incluyente que ayude a las personas con dificultades para desplazarse.
Explicó que el Plan de Desarrollo Sostenible de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) tiene 17 objetivos proyectados a cumplir en 2030, con los que se pretende garantizar la reducción de la marginación y privilegiar la protección del medio ambiente.
En la lista de propósitos se incluye la Agenda de Inclusión y Derechos para salvaguardar las garantías individuales de los grupos vulnerables.
Mientras que otras ciudades de México han adoptado ese proyecto mediante leyes de movilidad, en Zacatecas no se tiene un plan de reingeniería e infraestructura urbana para cumplir con los requisitos para accesibilidad, conectividad e inclusión en favor de los discapacitados, resaltó la especialista.
Recalcó la importancia de que en la capital se adapte un modelo sostenible y resilente, es decir, que contemple planes de contingencia para dotar de seguridad a las personas con discapacidad, incluirlas y “vencer los esquemas anteriores”.
Los edificios de la ciudad “no son amigables” con sectores minoritarios, pues carecen de rampas, barandales y otros implementos, además de que el transporte público es obsoleto y pocas unidades cuentan con aditamentos para trasladar a discapacitados, expuso.
Janett Jiménez consideró que estas fallas representan “barreras de desplazamiento para acceder y movilizarse por la capital”; en este tema, Joaquín Alva Ruiz Cabañas, director general de Atención a la Discapacidad de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), coincidió con la conferencista.
El funcionario federal participó en el evento con la ponencia Cultura del Respeto de los Derechos de las Personas con Discapacidad.
En su intervención, ejemplificó su experiencia en Zacatecas, pues dijo que al estar en silla de ruedas, le resultó muy difícil trasladarse.
Refirió que en el aeropuerto no encontró personal capacitado que lo auxiliara, luego se le complicó encontrar transporte para llegar al centro de la ciudad y, una vez ahí, se encontró con múltiples obstáculos en la vía pública.
Jiménez Santos y Alva Ruiz Cabañas agregaron que la población no tiene cultura vial, lo que afecta también a las personas discapacitadas, pues los automovilistas obstruyen las rampas de las banquetas y no respetan los cajones de estacionamiento señalados como exclusivos para el sector.
La arquitecta propuso ejecutar proyectos de reestructuración de accesibilidad para los grupos vulnerables, ya que, subrayó, en la entidad no se tiene una ley de movilidad incluyente.
Por último, urgió al gobierno del estado a gestionar recursos para trabajar en una cadena de movilidad, con el enlazamiento de los edificios mediante la infraestructura adecuada y la modernización del transporte público, a fin de mejorar la calidad de vida de grupos minoritarios.
Zacatecas, un reto para discapacitados
María de la Luz Domínguez Campos, presidente de la CDHEZ, admitió que el estado no ha avanzado en temas de movilidad e inclusión a personas con discapacidad, pues refirió que el reglamento de construcción para atender a este grupo no se respeta.
Reconoció que en el tema del transporte público para este sector, la entidad está en un nivel por debajo de 5 por ciento, ya que no hay opciones para el traslado de estas personas.
La funcionaria enfatizó que se deben analizar los temas de movilidad a fondo, no sólo para la población que sufre de una discapacidad motora, visual o auditiva, por ejemplo, sino para otros grupos con dificultades para desplazarse, como los adultos mayores.
“Con lo que se cuenta no es suficiente, además que no hay reportes de su adecuado funcionamiento en el transporte; es por ello que se debe ejercer un consenso de interdependencias para estar de acuerdo e impulsar acciones concretas y no sólo en papel”, sentenció la ombudswoman.
Reiteró que no existe un plan desarrollado para atender a sectores minoritarios y que tampoco se tiene una estrategia para trabajar con estos grupos.