CALEXICO, EU.- En Estados Unidos no hay cabida para nadie más.
Así lo dijo ayer Donald Trump al asegurar que el sistema de asilo para refugiados está lleno, durante su visita a Calexico, California, donde se reunió con autoridades de la Patrulla Fronteriza para inspeccionar la construcción de vallas de acero.
“Nuestro país está lleno. No podemos tenerlos, lo siento”, aseguró el republicano.
El Presidente también indicó que hay un aumento colosal de llegadas de migrantes y aseguró que va a hacer 400 millas (640 kilómetros) del muro que lleva prometiendo desde 2016.
“Realmente estamos progresando en dejar que la gente sepa que esto es una emergencia”, agregó.
La segunda visita de Trump al sur de California en más de dos años de mandato le sirvió para hacerse una foto junto a la valla en Calexico, fronterizo con Mexicali.
En ese segmento de la frontera, como en todas las zonas urbanas, hay una valla desde hace décadas. El lugar que Trump visitó es una parte de la misma cuya renovación se aprobó en 2009, durante la Administración de Barack Obama. Cuando se terminó de construir, el pasado octubre, la Secretaria de Interior, Kristjen Nielsen, dijo que era un muro y le puso una placa en la que dice que es el “primer segmento del muro de Trump”.
Sentado junto a él, el general Todd Semonite, del cuerpo de ingenieros, dijo que ya se han renovado 130 kilómetros de valla.
“Con el dinero que usted ha conseguido”, le dijo al Presidente, se habrán construido 450 millas (725 kilómetros) en diciembre de 2020.
Se trata de alrededor de 6 mil millones de dólares que Trump ha desviado de fondos de Defensa a través de una declaración de emergencia nacional.
Dicha medida fue revertida por el Congreso por acuerdo de demócratas y republicanos, pero el Mandatario vetó la decisión y trata de seguir adelante con esa apropiación de dinero.
Mientras el Air Force One aterrizaba en el estado, California y otras 19 entidades que demandaron a Trump por su declaración de emergencia, pidieron una orden judicial para evitar que los fondos sean desviados para financiar el proyecto.
Además, los demócratas de la Cámara de Representantes entablaron una demanda para evitar que el Presidente gaste más dinero del que Congreso aprobó para erigir barreras a lo largo de la frontera.
Trump no se reunió con ninguna autoridad local de Calexico ni del condado de Imperial. Sus únicos acompañantes políticos fueron asambleístas republicanos del Legislativo de California y congresistas californianos, entre ellos el líder de la minoría republicana en la Cámara baja, Kevin McCarthy.