Con anécdotas personales y un emotivo recuento de las múltiples aportaciones al patrimonio cultural y urbano de Zacatecas, inició el Ciclo de Conferencias en homenaje póstumo al arquitecto Héctor Castanedo Quirarte.
Este evento tuvo las intervenciones de Carlos Augusto Torres Pérez, jefe de la Oficina de la Dirección General del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y José María Muñoz Bonilla, director del Centro INAH Zacatecas, así como, de manera virtual, de Diego Prieto Hernández, director general del INAH, bajo la moderación de la historiadora Jánea Estrada Lazarín.
La mejor manera de recordar al arquitecto Héctor Castanedo Quirarte, coincidieron los ponentes y el público que asistió, es luchando por la preservación y conservación del Centro Histórico de Zacatecas, tarea que le corresponde a los tres niveles de gobierno y a la sociedad civil.
El Ex Templo de San Agustín y sus cuatro fachadas, la Plazuela Miguel Auza, el Centro Platero, Ciudad Argentum y el retablo de la Catedral Basílica fueron algunos de los temas abordados en el inicio de este ciclo, que se convirtió en una charla entre zacatecanos, amantes de su ciudad y sus edificios.
La obra de Héctor Castanedo abarcó todos los ámbitos de la profesión, y sus proyectos siguieron desarrollándose porque él tenía la visión de planeación, dijo Carlos Augusto en su intervención.
En el Patio Central del Museo Zacatecano, Carlos Augusto dijo: “estamos en el lugar ideal para hablar de él, aunque no hay lugar que él no haya intervenido; diseñó, planeó y gestionó con gran maestría. Él, sin duda alguna, fue y será un personaje indispensable en el Zacatecas actual, no se podría entender Zacatecas sin la intervención del arquitecto”.