Humberto Márquez Covarrubias, docente e investigador de la Unidad Académica de Estudios del Desarrollo (UAED), declaró que es necesario que desde la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), que está buscando transformarse, se haga un diagnóstico de las formas de trabajo para articular formas multi, trans e interdisciplinarias.
Ya que actualmente en la UAZ “no existe todavía un programa de investigación de amplio espectro que se plantee toda la problemática y tampoco hay una comunidad de investigadores plenamente articulada que esté cultivando el trabajo transindiciplnario o interdisciplinario”.
Bajo este contexto, Márquez Covarrubias informó que las capacidades de investigación de la UAZ son todavía limitadas y no hay investigadores “como tal”, esto debido a que todos tienen la figura de docente e investigador, sin desarrollar las acciones de investigación.
“Sin embargo, hay que aceptar que tiene mucho potencial de desarrollo, donde ha crecido el número de investigadores reconocidos, así como destacados que tienen presencia en el ámbito nacional e internacional”, expuso.
Además, no hay centros de investigación especializados con trabajo de corte multidisciplinario, transindicipinario e interdisciplinarios, en cambio, “existe una dependencia interna que registra proyectos individuales para acceder a los programas”.
“Hay investigadores que a título personal portan estas capacidades o que colaboran con otros grupos fuera de su universidad, donde se realizan este tipo de trabajos”.
Otra de las faltantes que refirió Márquez Covarrubias son los fondos interinstitucionales dentro de la propia máxima casa de estudio para financiar proyectos de investigación de problemas sociales complejos, por lo que “no se estimula la investigación de proyectos estratégicos dentro de la UAZ, hay mucha tarea por hacer”.
De igual manera prevalece “un problema de diseño institucional, donde la UAZ funciona en un conjunto de programas monodisciplinares y profesionalizantes, sin embargo, hay una especie de disfuncionalidad en la estructura académica, administrativa e investigativa con un caparazón de las áreas de conocimiento, donde hay aparentemente todo el potencial de fomentar un trabajo interdisciplinario y transdiciplinario”.
Lo anterior durante el conversatorio en torno al libro Sentir y trasformar un modelo de análisis de problemas sociales complejos, de Antonio Amozurrutia de María y Campos.