Para cuidar sus ventas, la industria restaurantera de Zacatecas ha decidido absorber los recientes incrementos en los costos de los alimentos, insumos y materia prima, en lugar de elevar sus precios, a pesar de las pérdidas que esto pudiera representar en sus utilidades.
“Los aumentos no se pueden reflejar de manera proporcional en nuestro menú de productos, pues nos salimos de los precios del mercado y de la capacidad económica del consumidor”, explicó Carlos de la Torre García, quien encabeza la delegación de la Cámara Nacional de Industria de Restaurante y Alimentos Condimentados en Zacatecas (Canirac).
De la Torre García comentó que los negocios afiliados a la Canirac buscarán una reorganización interna tanto en aspectos administrativos como operacionales para reducir los gastos fijos sin perder la productividad dentro de los negocios zacatecanos.
“Como dicen por ahí: hacer más con menos. Para darle frente a estos aumentos y a la inflación de este año”, dijo el líder empresarial.
Para de la Torre el aumento a los precios de los negocios no ayudaría a la reactivación económica que se busca, a pesar de que la industria restaurantera fue una de las más afectadas en los dos últimos años a raíz de la pandemia provocada por la COVID-19, con una operación del 25 por ciento de su capacidad durante el 2020 y al 60 por ciento durante el 2021.
El líder restaurantero aceptó que tampoco este 2021 ha comenzado de la mejor manera, con “las restricciones anunciadas del 10 al 24 de enero donde el cierre de restaurantes es a las 10 de la noche y el aforo al 80 por ciento; definitivamente no es un buen inicio de año”.
“A partir del pasado 9 de enero se han contraído nuestras ventas a un 40 por ciento, pues la población está confinada en sus casas, lo cual es bueno para hacerle frente a la pandemia, pero lamentable para el tema económico”, aseguró.
Sin embargo, insistió en su esperanza de que el índice de contagios disminuya al mismo nivel que se ha elevado, además de solicitar a las autoridades en mantener su trabajo en no bajar su ritmo de trabajo con la aplicación de vacunas y las medidas sanitarias, que puedan apoyar “a la reactivación económica que tanto necesitamos”.