El obispo de la Diócesis de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló, celebró la vasta participación de los fieles en su regreso a los templos en este Domingo de Ramos, tras dos años debido a la pandemia de la COVID-19.
Tras brindar su misa en la Catedral Basílica, Noriega Barceló consideró que la alta afluencia de fieles a las celebraciones religiosas “es explicable”.
“Dos años de estar en casa. Dos años sin este tipo de presencia física, que es importante para alimentarnos y retroalimentar no solamente nuestra fe, sino también nuestra vida social”, comentó.
Noriega Barceló también informó que volverán a realizarse las representaciones tradicionales de Semana Santa de manera presencial, aunque se le pidió a cada capilla mantener las medidas preventivas para evitar contagios y cuidar así la salud de los feligreses y participantes.
“Creo que en esto lo más importante es ir logrando que la misma persona que sale de su casa, se cuida. Si tiene algún síntoma de algún resfriado, vale más no arriesgarle. Porque hay contagios y en esos casos hay que quedarse en casa”, pidió.
El líder religioso también resaltó el proceso democrático de Revocación de Mandato como “un ejercicio plausible”, aunque expresó su inconformidad debido a la época del año en que se realiza.
“No estamos acostumbrados a este tipo de ejercicios en este tiempo, mucho menos en Semana Santa. No estamos acostumbrados y me temo que no es el tiempo oportuno para mucha gente, pues hay prioridades en la vida de cada persona”, afirmó.
Incluso, Noriega Barceló no descartó que la realización de este proceso durante el Domingo de Ramos pudo haber sido hasta parte de una estrategia política.
“Puede ser una estrategia y es cuando algo bueno, como es la participación ciudadana, se puede echar a perder, porque hay otras intenciones, otros intereses, porque hay el interés de que no acuda tanta gente”, refirió.