Río Grande.- Retraso del flujo vehicular y una serie de problemas relacionados con éste, protagonizan decenas de padres de familia que congestionan de lunes a viernes la calle Sertoma al llevar a sus hijos a la escuela.
La misma hora de entrada y salida en los tres centros escolares ubicados a finales de la estrecha calle provoca que el problema se agudice desde muy temprana hora.
La primaria García Salinas cuenta con 648 niños, el colegio Margil con 450 y el jardín de niños Rosario Castellanos, con 240 pequeños, que en total suman mil 338 niños para un pequeño segmento de cuadra donde todos tienen que llegar a tiempo.
La delegación de Transito en el municipio designa un elemento para la zona, lo que resulta insuficiente, pues según padres de familia la calle funciona en doble sentido, lo que ocasiona caos.
Al respecto, el oficial Refugio Medina informó que a pesar de que han solicitado el apoyo de los elementos de Seguridad Pública para que los auxilien en las horas de mayor crisis, algunos padres siguen sin respetar los señalamientos “y cuando menos acuerdan ya están parados, sin pasar ni dejar pasar por el gran flujo de vehículos”.
“En esas horas es cuando invitamos a todos los padres de familia a que dirijan sus coches por un sólo sentido, pero más de un inconforme hace caso omiso a nuestras indicaciones”, aseguró.
De igual forma, explicó que la desatención a los señalamientos de vialidad es muy grave, ya que puede ocasionar accidentes por tratarse de una zona donde hay niños.