Guadalupe.- El gobierno del estado, el ayuntamiento de Guadalupe y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), desataron una masacre en el Jardín Juárez, donde fueron talados varios árboles con más de cien años de historia.
A decir de uno de los encargados de las obras, señaló que él solamente tenía instrucciones de llevarse las palmas y replantarlas en el Jardín Purísima.
Maquinaria pesada, sierras, camiones de volteo, camionetas de 3 toneladas, fueron las armas para derribar y trasladar los restos de los árboles, que en algún tiempo proporcionaron sombra a los habitantes de Guadalupe.
Por su parte, Salvador García Murillo, director del departamento de Obras Públicas en Guadalupe, informó que el hecho de que se estén talando los árboles en el Jardín Juárez es parte de la rehabilitación que actualmente se lleva a cabo.
Al menos una veintena de estos árboles, que ya se encontraban en muy mal estado han sido retirados, otros se trasplantarán a La Condesa y otros a la avenida La Fe.
El funcionario municipal explicó que el gobierno del estado contrató a la empresa que actualmente se encarga de la obra y cuenta con los permisos necesarios para llevar a cabo dicho proceso.
Asimismo, informó que se colocarán nuevos árboles en donde se han quitado; esto se hará en coordinación con el área de Parques y Jardines del ayuntamiento, que colaborarán para la plantación de los nuevos árboles y para trasplantar los que se han quitado, a fin de dar una mejor imagen a la avenida La Fe y a La Condesa.
El personal de dicha área se encargará también del mantenimiento de los mismos.
Algunos habitantes de la ex villa de Guadalupe, indignados, fueron testigos de la aniquilación de esos árboles del jardín principal.