México vive en septiembre con sus colores, música, platillos y vestimenta típica. La alegría se desata en el corazón de los mexicanos con un nacionalismo pocas veces en todo el resto del año. Terminadas las fiestas llega la resaca de El Grito de Independencia y además de un dolor de cabeza, deja los bolsillos vacíos.
Un estudio de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) reveló que las familias mexicanas gastan 483 pesos o más en la cena o festejo de la noche del 15 de septiembre. Esta fiesta conmemora El Grito de Dolores que dio inicio a la rebelión contra la Colonia Española.
El analista de Profeco Carlos García Soto explicó que en casi 80% de las cenas se reparte el gasto de la fiesta entre las familias asistentes y que en promedio el desembolso total lo cubren cinco familias.
El 2010 fue el año del derroche patriótico, en esa ocasión los mexicanos gastaron 539 pesos. “Esto se puede atribuir a la conmemoración del bicentenario, el cual generó una gran expectativa, toda vez que hubo eventos especiales en la mayoría de las entidades federativas,” explicó García.
Aunque los gastos de las fiestas patrias no son de rutina, tampoco dejarán un impacto fuerte en las economías de las familias.
“El financiamiento que hacen las familias es ‘sano’ debido a que 97% de los entrevistados espera cubrir los gastos sin acudir a ningún tipo de préstamo”, dijo.
Septiembre es el mes patrio por excelencia y se sabe que está cerca, antes de que comience a figurar en nuestro calendario, cuando el verde, blanco y rojo se manifiestan con banderas y arreglos de colores.
En muchos hogares mexicanos adornan sus casas. El sondeo en línea de Brújula de compra de Profeco descubrió que 36% de las personas adorna con objetos que compraron en otros años, mientras que 30% espera comprar alguna decoración para ambientar su casa.
La mayoría de los mexicanos festeja con una cena, 33% lo hace en su casa, 56% en el hogar de amigos o familiares. 20% celebra fuera de casa, de ellos 13% asiste a una plaza pública y 7% restante acude a algún bar o restaurante.
La Profeco recomienda a quienes festejan en algún restaurante o antro que estén atentos, pues en ningún establecimiento pueden negar una mesa a menos de que compres una botella, esto está prohibido y penalizado por ser condicionamiento.
“Los precios deben estar a la vista o en la carta, y los antros deben cumplir con las promociones que ofrecen”, explicó García.
Los establecimientos tampoco pueden obligarte a pagar un consumo mínimo, ni cobrarte el servicio o exigirte propina pues esta es voluntaria.
El pozole es el rey de las fiestas patrias, 40% de los festivos mexicanos lo pondrán en su mesa. El 60% restante cena algún otro platillo de la vasta gastronomía mexicana.
“Si vas a realizar una cena en tu casa, es habitual compartir los platillos que se servirán, por lo que no olvides organizar con tiempo a tus invitados para que cada uno pueda preparar la comida o comprar la bebida con anticipación”, aconsejó García.
Septiembre es el mes patrio por excelencia. La fiesta de conmemoración de la Independencia de México es una buena ocasión para estar en compañía de amigos y familiares. Sin importar las emociones no se debe olvidar que los excesos en gastos y festejo podrían dejar secuelas.