Zacatecas-. Aún cuando la Auditoría Superior de la Federación (ASF), demostró que la deuda pública de Zacatecas incrementó en 407 por ciento de 2009 a 2011, siendo el mayor incremento en 2011, el mandatario estatal Miguel Alonso Reyes, reiteró que esto es responsabilidad de la administración anterior.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, que dio a conocer la ASF, la deuda pública al último día de diciembre de 2010 ascendía a 682 millones de pesos, un año más tarde, es decir el 31 de diciembre de 2012, el monto era de 3 mil 708.5 millones de pesos.
De tal forma que la deuda per cápita, es decir por habitante, en 2010 era de 455.5 pesos y para 2011 llegó a dos mil 457.8 pesos.
No obstante, Alonso Reyes reiteró “más que un aumento de esa dimensión, que es un tema importante y que hemos estado comentando, es que parte de la deuda de la administración pasada no fue registrada como deuda”.
El titular del Ejecutivo indicó que esto se debió a que, como Ciudad Administrativa se construyó a través de un Proyecto de Prestación de Servicios (PPS), no fue registrada como deuda, aunque finalmente era un compromiso que los zacatecanos tenían que asumir por 21 años.
Agregó que al momento en que se impulsó el rescate financiero, donde se hizo la sumatoria de todo lo que la entidad adeudaba, “fue lo que generó un monto de esa naturaleza, pero no es que lo haya generado el gobierno a su cargo”, justificó el mandatario.
Pues aunque reconoció que sí aumentaron las partidas “para la construcción de batallones militares, inversión en seguridad, naves industriales y otro tipo de acciones, la reestructuración de todas estas deudas chiquitas, deudas con acreedores, fue lo que generó que en un solo monto se sumara lo pequeño, lo mediano y lo grande”.
Señaló que los datos que da la ASF aparentan un crecimiento muy elevado, que no corresponde al generado por su administración.
Aunque una salida para disminuir dicha deuda podría ser el aumento de los impuestos, el gobernador del estado comentó que no es una acción que se tenga contemplada, y que al contrario se exentó a los contribuyentes del pago de la tenencia, por el largo estiaje que se dio durante 2011, que afectó no sólo a agricultores y ganaderos, sino también a comerciantes y a toda la cadena productiva.
Sin embargo señaló que lo que sí sería positivo para la entidad es que pagaran más impuestos quienes generen mayores ingresos, en este caso las grandes empresas, y no afectar a las familias de escasos recursos.