Fresnillo.- Una de las tradiciones más antiguas que se realizan para este 1 y 2 de noviembre son las calaveritas de azúcar, con las cuales se rinde tributo a la personas que perdieron la vida, además de servir como ofrenda en los altares de muertos, sin olvidar que son una deliciosa golosina para las personas que se encuentran con vida.
Elvira Rodríguez González, comerciante de El Mineral, mencionó que más allá de representar un negocio, el realizar y vender estos típicas golosinas del Día de Muertos es una tradición que se ha conservado por tres generaciones en su familia y que inculca a sus hijas.
Rodríguez González informó que desde el año anterior las ventas de estos dulces fue baja, motivo por el cual este año solamente elaboró aproximadamente 600 calaveritas, lo que representa 50 por ciento en comparación con la producción de años anteriores.
Los preparativos para este dulce comienzan en agosto, para tenerlas lista en estas fechas, ya que considera que es un trabajo artesanal, además de que la decoración requiere su tiempo.
Para su elaboración, se necesita azúcar, la cual se funde hasta quedar liquida, para después colocarla en moldes de barro en forma de cráneo, los cuales se dividen en dos partes para cuando se enfríen quede formada la figura, y para su decoración se necesita, azúcar glas, colorantes vegetales, diamantina y lentejuelas.
El precio de estas calaveritas es variado, las más pequeñas tienen un costo de dos pesos, hasta las más grandes de 75 pesos.