México.- El crecimiento desordenado de la mancha urbana y la reducción de la población rural avanzan y se han convertido en una amenaza para el equilibrio social del país, advirtió el secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Jorge Carlos Ramírez Marín.
Mencionó que la desvalorización de la tierra rural practicada desde el gobierno, instancias oficiales y hasta las instancias de propiedad social, han provocado que se presenten conflictos agrarios en el país.
Indicó que uno de los errores que se ha cometido desde años anteriores es la aplicación de la ley, lo cual ha provocado el surgimiento de manera irregular de desarrollos de vivienda e industriales en todo el país.
Comentó que en Plan Nacional de Desarrollo se elaboran los instrumentos necesarios para atacar este problema con el consenso de la Federación, estados y municipios.
Entrevistado al término de su participación en el foro La Creación de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano y la Realidad Agraria (Sedatu) de México, expuso que la dependencia a su cargo trabaja en la creación de un marco legal para el reordenamiento territorial urbano.
Lo que se busca, dijo, es redireccionar el desarrollo urbano para que no haya un caos.
Indicó que en los últimos años se han atendido 700 mil casos por el Tribunal Agrario, lo cual que “nos demuestra lo grave de este problema en todo el territorio nacional”.
Alertó que ante la situación por la cual atraviesan los trabajadores del campo, sobre todo los de tierras ejidales, son presa fácil de “coyotes” y son los que verdaderamente generan problemas entre ejidatarios y operadores inmobiliarios.
La mancha urbana en el país, dijo, ha crecido de manera vertiginosa y por arriba del crecimiento poblacional y de alguna manera debe ser frenado o controlado.
“Los oportunistas compran la tierra barata y se aprovechan de la difícil situación por la que atraviesan ejidatarios y campesinos, sin tomar en cuenta la situación jurídica de estos predios”, expuso.
Afortunadamente, agregó, los desarrolladores urbanos nos han dado su voto de confianza para que estos polos se puedan construir dentro del marco de la ley.
Por ello, abundó, “invitamos a los comisarios ejidales a que se acerquen con nosotros para orientarlos y no sean presas de vividores y que los recursos que obtienen por la venta de sus propiedades realmente los beneficien”.