México.– Aunque con matices, las principales centrales obreras del país consideran positivo que el gobierno federal busque frenar la llamada “fuga de cerebros”, incrementando el presupuesto para ciencia y tecnología, pero coincidieron en que los sectores privado y social deben hacer su parte.
El secretario de Acción Política de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), Fernando Salgado, dijo que en el Presupuesto de Egresos de 2013 prevé un monto para ciencia, tecnología e innovación de 70 mil 395 millones de pesos, 15 por ciento más que en 2012.
El también integrante de la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados recordó que el presidente Enrique Peña Nieto anunció una inversión de 950 millones para ampliar la capacidad de los institutos tecnológicos del país e iniciar con otros dos mil 500 millones un programa para el desarrollo científico y tecnológico.
A su vez, el dirigente de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), Isaías González Cuevas, opinó que la llamada “fuga de cerebros” tiene pros y contras.
Señaló que el beneficio radica en la educación, porque hay sectores de la población que buscan instruirse para conseguir empleos mejor remunerados en el extranjero, pero México pierde cuando invierte en los estudios de estas personas en el extranjero y no regresan.
El también integrante del Consejo Técnico Nacional para la Productividad refirió que se está generando más demanda mundial de profesionistas altamente calificados, lo que se traduce en mayor migración de científicos especializados.
Destacó que de acuerdo con informes del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) casi 130 mil científicos mexicanos abandonan el país buscando mejores oportunidades, lo que se debe aminorar.
Añadió que datos de la Secretaría de Educación Pública revelan que México pierde 900 millones de pesos anuales en fuga de cerebros, dado que la formación de cada profesionista que se va cuesta al país 45 mil pesos.
El presidente colegiado de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), Agustín Rodríguez Fuentes, consideró que han resultado insuficientes las acciones en las distintas administraciones de gobierno para mejorar las oportunidades de empleo calificado y bien remunerado.
Refirió que, según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación las Ciencias y la Cultura (Unesco), casi 20 mil personas se van de México teniendo al menos una licenciatura, debido a la violencia, el narcotráfico y secuestro, la pobreza, los sueldos bajos, desempleo y desigualdad, entre otras razones.
Recordó que en 2007, especialistas de la UNAM participaron en una conferencia denominada “La migración de las neuronas”, donde consideraron que la migración de talentos debe tener el componente de la búsqueda de especialización, pero que haya oportunidades de que a su regreso encuentren expectativas de desarrollo.
Entrevistados por separado, los tres dirigentes sindicales y obreros señalaron que sin la participación de los sectores privado y social, no habrá gobierno que pueda revertir la “fuga de cerebros”.
Afirmaron que los empresarios y las organizaciones no gubernamentales están obligadas a brindar más y mejores oportunidades de desarrollo a los científicos y profesionistas mexicanos, pues sólo de esa forma se podrá retener a los talentos del país.