México.- La mayoría de las mujeres mexicanas aún están lejos de considerarse empoderadas, es decir, de poder autogestionarse y decidir por sí mismas, aseveró Cinthia Cruz del Castillo, académica del Departamento de Psicología de la Universidad Iberoamericana (UIA).
Durante la celebración de los 70 años del voto femenino en México, señaló que el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social reveló que 46.3 por ciento de la población femenina en el país vive en situación de pobreza y marginación, punto que debe tomarse en cuenta al hablar a ese grupo poblacional sobre el tema.
La investigadora coordinó la publicación del libro “Mujeres en transición: reflexiones teórico-empíricas en torno a la sexualidad, la pareja y el género”, publicado por esta casa de estudios, cuyo análisis indicó que existen divergencias entre mujeres de diversos entornos sociales.
Incluso, añadió, en los grupos élite prevalece la cuestión de que “la sexualidad va ligada a la maternidad”, y se entiende que la plenitud de la mujer sólo es alcanzada al convertirse en madre.
Por cuestiones como ésta, “estamos bastante alejadas de llamarnos o de considerarnos empoderadas”, aseguró la especialista en un comunicado de la UIA.
En relación a las nuevas generaciones, afirmó que aunque el panorama es más abierto, todavía se manifiestan actitudes que no concuerdan con la necesidad de la autogestión.
“Aunque tienen mayor motivación al logro, pues hay un mayor acceso a la educación para las niñas que en el pasado, que todavía en los hogares prevalecen ideas como ‘no estudies, si de todas maneras te vas a casar’, ‘para qué desperdiciamos el dinero, si quien debe mantenerte es tu esposo´”, lamentó.
No obstante, la psicóloga encuentra una esperanza en las redes sociales, pues “hay jóvenes que se enteran de otras formas de interactuar, que no son las mismas que vemos en México y les hacen pensar y cuestionarse, y aprender que hay que transformarse para convivir de mejor manera”.
El empoderamiento de la mujer es benéfico a nivel colectivo, pues está ligado a un enfoque más centrado en las competencias individuales, lo cual puede traducirse en mayor competitividad a nivel profesional, enfatizó.