Zacatecas.- El obispo Sigifredo Noriega Barceló aceptó que la paz es una “asignatura pendiente” y destacó que es importante que la población participe en las estrategias para disminuir la violencia, tras respaldar una marcha que pretenden realizar en Michoacán con este objetivo.
Agregó que si bien de manera general se observa una menor incidencia delictiva en Zacatecas, algunas regiones del estado tienen incrementos en estos índices durante algunos meses, por lo cual no dejan de preocupar delitos como el secuestro.
“La construcción de la paz es un problema que siempre estará presente, aunque en Michoacán iniciaron con una estrategia por la urgencia y tremenda necesidad de vivir en paz”, detalló el religioso sonorense.
“Me parece una estrategia totalmente aceptable (realizar una marcha); si es una forma de hacer conciencia y generar la responsabilidad de que todo mundo participe en pro de la paz, estoy totalmente de acuerdo”, expresó.
Tras señalar que ha conocido algunos casos recientes de secuestro, indicó que estos hechos afectan a las familias, pero que dependen de los ciudadanos los movimientos que se hagan para mejorar esta situación.
“Lo que me ha tocado escuchar a mí (de incidentes delictivos) realmente es poco, aunque he escuchado un poco más la última semana sobre los secuestros, en toda esta área que se encuentra entre Calera y Morelos”.
“Es sufrimiento para las familias y un futuro negado para la gente, lo que trae mucha problemática social, porque hay menos empleo, inversión y confianza de salir a las calles; aunque el mejor termómetro es la gente”, dijo el obispo.
Agregó que el incremento de cuerpos humanos que son sepultados en las fosas comunes podría representar el miedo de algunas familias para recuperar a sus difuntos, o la poca importancia que se tiene a su memoria.
“Es un problema muy profundo, muy serio, para los familiares que no saben si viven o mueren sus congéneres; pero también para la sociedad, porque puede ser el reflejo (de) una sociedad anónima que no es capaz de identificar a una persona. Es una llamada de atención para pensar en la vida”, detalló Noriega Barceló.
Respecto al Día de los Fieles Difuntos, el representante de la Iglesia Católica en la Diócesis de Zacatecas aseguró que se dio una buena participación de la feligresía en las celebraciones religiosas.
Recordó que si bien la mayor parte de la población acudió a los panteones de la entidad, también le tocó ver feligreses que acudían a los templos a recordar a sus familiares difuntos.