Jerez De García Salinas. Al son de la música y de consignas, decenas de filarmónicos marcharon por las principales calles 0de la cabecera municipal de Jerez como protesta por las disposiciones que tomaron las autoridades locales, para que dejaran de tocar en las calle Guanajuato y San Luis.
Con pancartas en que exigían su derecho a trabajar, los músicos caminaron interpretando al unísono las canciones más pedidas por propios y extraños, aunque en algunos momentos se dejaban escuchar las consignas: “queremos trabajar, queremos trabajar”.
Mientras transcurría la protesta, se fueron sumando más músicos inconformes que respaldaban esta petición; al llegar al edificio de la presidencia municipal, detuvieron el recorrido, pues en la puerta del edificio ya los esperaba un grupo de policías preventivos y elementos de Seguridad Turística, quienes, ante la orden, formaron un cerco.
Minutos más tarde, el secretario del Ayuntamiento de Jerez, Samuel Berumen de la Torre, se entrevistó con los filarmónicos, quienes exigían sostener un diálogo con el alcalde José Manuel de Jesús Viramontes Rodarte.
Sin embargo, cedieron a la petición del funcionario y arribaron a la sala de cabildo, pese a los gritos de consigna para ver al presidente municipal.
Ya en la mesa de diálogo, los quejosos insistían ante el secretario sobre la afectación económica que han sufrido a raíz de la disposición de las autoridades.
Recordaron que estas agrupaciones musicales han permanecido por varias generaciones desempeñando su trabajo en el área que hoy está prohibida para ellos, además de ser una parte fundamental de las tradiciones de Jerez.
En reiteradas ocasiones se hizo mención del incumplimiento de las promesas de campaña del presidente municipal, al argumentar que fueron engañados, y recordaron que ellos dependen exclusivamente de esta actividad.
El funcionario explicó que la disposición obedece a las quejas ciudadanas derivadas del cuello de botella que se ocasiona para los vehículos que transitan en la zona, y para evitar el consumo de bebidas embriagantes en la vía pública, principalmente en el área en disputa.
Ante este comentario del funcionario, un filarmónico alzó la voz para pedir que se comience a vigilar los lugares donde se venden bebidas embriagantes a menores de edad, pues aseguró que es frecuente detectar a adolescentes consumiendo alcohol en la vía pública, mientras que los elementos de la policía no intervienen.
Debido a que no llegan a acuerdos, los filarmónicos determinaron esperar la llegada del alcalde, y horas más tarde conformaron una comisión para la negociación, aunque al cierre de edición no se habían dado a conocer los resultados debido a que se realizó a puerta cerrada.