Zacatecas.- Carlos Augusto Torres Pérez, delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Zacatecas, informó que los restos óseos encontrados en el templo de San Juan Bautista en el municipio de Pánuco, fueron re inhumados en sitio donde se localizaron.
Explicó que la forma en que fueron extraídos no fue la adecuada y por ello se perdió la oportunidad de conocer datos importantes, pero que si en algún momento se opta por estudiarlos, se podrá repetir el procedimiento, conscientes de que están descontextualizados.
El delegado explicó que el mal manejo de los restos óseos provocó la pérdida del valor científico, y si se hubieran analizado conocerían el sexo de las personas a quienes pertenecían, la edad y posiblemente las enfermedades que hayan padecido, pero no rasgos sociales, tales como su estrato.
El delegado reconoció que el INAH debió tener precauciones para evitar los daños, sin embargo justificó que la instancia carece de personal para realizar los monitoreos de manera constante, ya que son muchas las obras que hay al interior del estado.
Indicó que los arquitectos del proyecto actuaron de manera adecuada y notificaron al Instituto el hallazgo, pero quienes cuidan el templo, presuntamente extrajeron los huesos para evitar saqueos; hasta el momento no se ha investigado a detalle la responsabilidad del mal manejo de los restos.
Al respecto, explicó que no hay normatividad que indique una sanción para quien haya ocasionado la pérdida de información, pero la responsabilidad recaería en los operadores del proyecto, por ser ellos los encargados de vigilar las obras y evitar que pasara un “detalle como este”.
Torres Pérez, indicó que es posible que ya se hubieran descontextualizado lo restos en restauraciones anteriores, que pudieron haber movido los huesos por las vibraciones y desmintió que se haya encontrado un ataúd, solamente habían restos de madera.