Fresnillo.- La mezcla de cacahuate, canela y azúcar son la base de los mazapanes artesanales que se elaboran en la empresa fresnillense Mazart, la cual no sólo se ha dado a conocer en Zacatecas, sino en varios estados de la República Mexicana.
En tan sólo dos años, esta fábrica familiar se ha posicionado en el gusto de los amantes del dulce, pues por semana ofertan cerca de 3 mil piezas a lo largo del país.
Fabiola García Delgado, propietaria del negocio, detalló que el amor por la elaboración de dulces lo tiene desde que era niña, pues uno de sus tíos se dedicaba a ésto en la Ciudad de México, de donde es originaria.
Sin embargo, las ganas de salir adelante y ofrecer algo nuevo a los fresnillenses fue lo que la motivó a perfeccionar la receta familiar, hasta conseguir la propia y deleitar a los habitantes.
“Aunque es una tradición familiar, a mí lo que más me ha gustado es crear y jugar con los sabores y colores del producto hasta conseguir algo único que nos distinga y le guste a la gente”.
Detalló que el proceso de elaboración se lleva alrededor de una semana, pues el primer día se dedican a moler y realizar las mezclas, las cuales dejan reposar para después aplastar la masa y darle la forma redonda.
Cuando el producto está listo, proceden a envolver y etiquetar los mazapanes de sabor canela y arándano en pequeños trozos de papel de china, para repartirlos en las tiendas de autoservicio y dulcerías, o bien, mandarlos por paquetería a otros estados, como Estado de México, Tamaulipas, Nuevo León, entre otros.
Complementó que, además del tradicional mazapán artesanal, también se dedican a la elaboración de mazapanes cubiertos de chocolate y trufas de chocolate rellenas de cereza, que también se elaboran de forma artesanal, con el apoyo de su esposo e hija, además de cuatro personas que trabajan en el negocio.