Zacatecas.- En la calle Del Deseo, número 106, en el Centro Histórico capitalino, se encuentra un lugar pequeño que pareciera que se esconde del bullicio de las principales calles.
En la parte trasera de la Catedral Basílica, entre verduras y guisos está Rosalina Benítez Rodríguez, lista para atender a cualquier hambriento que ponga un pie en el local de la lonchería Las Campanas.
Desde las 7:30 horas comienza con un saludo común: “buenos días ¿qué le vamos a dar? tenemos enchiladas, tortas, flautas, tacos de guisado ¿qué va a querer?”
Con una sonrisa y una amabilidad casi excesiva, Rosalina acostumbra limpiar constantemente la barra de preparación como si se tratara de una persona obsesiva con la limpieza, lo que a su vez da garantía a sus clientes de comer en un lugar saludable y limpio.
Una experiencia agradable al paladar en un pequeño y acogedor lugar son las principales características de este económico establecimiento que desde hace más de 12 años es el punto de encuentro para el desayuno y comida para quienes trabajan en el centro.
“Aquí viene de todo tipo de gente, trabajadores oficinas, del tribunal, del Congreso, de la misma catedral, la gente regresa, le gusta y recomienda”, detalló Rosalina.
Sin duda la especialidad de la casa son las tortas de carne adobada, con deliciosa lechuga, jitomate y aguacate a la que puede añadir la salsa de su preferencia.
Para quienes no gusten de refrescos y jugos comerciales, Rosalina y su ayudante preparan jugos naturales de naranja, zanahoria y betabel, además de ricos licuados de frutas por la mañana.
Los precios oscilan entre los 20 y 45 pesos lo que hace la comida accesible para todo bolsillo, en horarios de 7:30 a 17 horas.