MONTE ESCOBEDO. La laguna de los Gamboas está ubicada a un kilómetro y medio al sur de esta cabecera municipal; se llega a este lugar por un camino en el que una parte es de concreto hidráulico combinado con empedrado y la otra de terracería.
El embalse es alimentado por medio de una acequia de unos dos kilómetros, proveniente del arroyo El Charco de la Mula.
Luis Alfonso Barragán Robles, cronista del municipio, informó que en 1912 unos jóvenes oriundos de este sitio construyeron tres lanchas de madera, a las que llamaron barquitos; les pusieron por nombres La Bohemia, La Blanca y La Nacional, en ellas remaban sobre las tranquilas aguas.
En aquellos años se hacían concurridos paseos y lunadas cantando al son de la guitarra. Sin embargo, la Revolución acabó con esos bonitos paseos.
En 1937, el gobernador de Zacatecas, general J. Félix Bañuelos, originario de este municipio, mandó construir dos bordos para ampliarla, uno en el lado sur y otro en el lado norte con su respectiva compuerta.
Poco tiempo después, en temporada de riego y debido a las acequias, más de 10 agricultores sembraban maíz, habas, papas y legumbres, cada uno, en una hectárea, en promedio.
En el ayuntamiento 1977-1979, con el apoyo de algunos ciudadanos, se instaló una tubería galvanizada de 6 pulgadas de diámetro desde la laguna hasta la cabecera municipal, que desemboca en el tanque de don Lauro Flores, en la loma.
A la fecha, la mayor parte de esta tubería se mantiene en funciones; más de 15 tomas están activas, pero sólo para dar servicio de abrevadero, es decir, para el consumo de los animales.
En los meses de abril y mayo del último año de la administración 2010-2013, se extrajeron aproximadamente 55 mil metros cúbicos de tierra, con lo que aumentó el volumen de agua, así como su profundidad.
Ahora, la laguna mide unos 700 metros de largo por 325 de ancho y su máxima hondura es de 5 metros. Por el lado sureste y oeste está rodeada de frondosos árboles, como el pino negro, encino blanco y variada vegetación.
Sobre el bordo de la compuerta norte están instalados dos molinos de viento, que extraen y dirigen el agua a dos ranchos, ubicados a menos de un kilómetro, por medio de mangueras de 1.5 pulgadas de diámetro.
En la laguna de los Gamboas se aprecian dos tipos de aves: residente y migratorias; entre las primeras hay pato triguero, gallareta americana y tildo. Entre las segundas, garzas blanca y ceniza, avoceta vientre blanco, distintas especies de patos, como el chalcuan, el de pico anillado o el rojizo.
También se pueden observar águilas pescadoras, grulla y en ocasiones peculiares se ha visto ejemplares de pelícano blanco.
En cuanto a peces, hay carpa, tilapia y lobina.
La laguna de los Gamboas es un lugar pacífico donde sólo se escucha el ruido del aire cuando choca con los árboles, el débil oleaje y el canto de los patos; además, se reflejan las nubes en las tranquilas aguas como si éstas se estuvieran mirando en un espejo.
Este lugar es muy hermoso; sin embargo, es poco visitada por la gente.
(Con información del libro Monte Escobedo histórico y pintoresco -1936- escrito por el presbítero Lauro Márquez, oriundo de este municipio).