ZACATECAS.- Zacatecas está rodeado de comunidades y municipios majestuosos como Genaro Codina, mejor conocido por sus cálidos y amables habitantes como San José de la Isla, lugar donde tiene su santuario el milagroso Niño de las Cumbres, cuya celebración es el 9 de septiembre, pero su “fiesta grande” es el 19 de marzo cuando se festeja a San José y lo honran con una feria que dura 10 días y es conocida como la Feria Regional de Genaro Codina (Feregeco) que lleva cuatro años de haberse instaurado.
Dentro de sus danzas autóctonas están las de Matachines y la del Monarca o la Pluma, galardonada esta última a nivel internacional.
Sus personajes son: el monarca, viejos danzantes y malinches. El personaje principal porta una máscara de sauz y corona de mixiote tejido de maguey, todo su conjunto representa a los españoles que llegaron a esas tierras en 1541.
Genaro Codina o San José de la Isla, como se prefiera llamar a este bello municipio, tiene atractivos naturales que lo hacen un destino turístico por excelencia, como los ríos Chiquito y Grande, que a su vez crean el afluente del Río San Pedro, que confluye por debajo de los cimientos del santuario del Niño de las Cumbres brindándole una mística especial.
Circundado por verdes cerros, San José de la Isla está custodiado por centinelas de cantera y piedra volcánica, y animales de corral como vacas, borregos y chivos conviven de manera armónica con el ambiente y las personas.
En cuanto a gastronomía, el visitante puede deleitar su paladar con unas “gordas de corazón”, elaboradas de principio a fin con maíz rellenas con frijoles y salsa de chile rojo.
Quien gusta de un buen licor puede degustar un vino de membrillo, hecho prácticamente a mano, así como la cajeta, que en su elaboración no interviene ningún elemento artificial.
Los domingos son de atole de grano, hecho a base de pulpa de maíz por manos expertas de la cocina tradicional, sin que intervenga algún elemento mecánico, rodillo o metate.
Al momento de hacer el recorrido por el jardín principal, NTR Medios de Comunicación interactuó con el presidente municipal de San José de la Isla, Armando Hernández Ortiz, quien explicó que hasta hace algunos sexenios atrás el municipio cambió de nombre a Genaro Codina.
“Pero los habitantes lo conocen por San José de la Isla y no como actualmente se llama, dado que tienen arraigo por sus orígenes”, subrayó.
A fondo, en los anales de la historia recopilada por expertos, en principio los frailes franciscanos influenciados los ingleses habían bautizado a la comunidad como Saint Joseph, y que luego fueron cambiando de nombre hasta quedar como San José de la Isla.
Posteriormente, el coordinador de asesores de la alcaldía, Braulio García, explicó que contrario a lo que muchos creen, el mariscal de campo de la Insurgencia Mexicana, Víctor Rosales, nació en Montegrande, perteneciente a San José de la Isla.
Dentro de los personajes ilustres que hay en el municipio mencionó a Gabriel Hernández García, quien es uno de los autores exclusivos del Fondo de Cultura Económica (FCE).
Seguido de ello en tesoros pertenecientes a la colectividad, develó que al interior del santuario del Niño de las Cumbres, la figura está enmarcada por zafiros y piezas de piedras preciosas.
En ese orden dogmático, apuntó que existe un testamento de la virgen de la Purísima Concepción, quien anteriormente era la imagen a la que le rendían devoción los feligreses; ocultos al público, también la iglesia cuenta con dos relojes solares que se encuentran en la azotea y que están conservados en perfecto estado.