TAPACHULA.- Alrededor de mil 500 extranjeros de Guatemala, Honduras y El Salvador iniciaron el Viacrucis del migrante “Todos Somos Americanos de Nacimiento” que pretende llegar a Estados Unidos en busca de asilo.
El contingente, en el que viajan 400 mujeres y niños, partió este domingo de ramos de la frontera sur de México para recorrer más de 3 mil 900 kilómetros hasta el norte del País.
Apoyada por la organización Pueblos Sin Frontera, el objetivo de la caravana es llegar a Estados Unidos y pedir protección para los sin papeles que han huido de sus países a causa de la pobreza y la violencia del crimen organizado.
Adalin Romero huyó de Honduras junto a varios integrantes de su familia por las amenazas de las pandillas.
Acompañado de su hermano, su hija y dos sobrinos, el indocumentado participa en el viacrucis con la esperanza de obtener protección norteamericana.
Brenda de la Cruz huyó de Guatemala junto a su esposo también por las pandillas.
“En Guatemala dejamos a tres de nuestros hijos, dos niñas de 14 y 12 años y un varón de siete. Nos vamos para poder brindarles una mejor vida y mandarlos a traer más adelante”, contó la mujer.
Irineo Mujica, integrante de la organización Pueblos Sin Frontera, explicó que el movimiento es también para visibilizar el calvario que sufren los migrantes en su paso por México.
El activista culpó la falta de presupuesto de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) para atender la ola de solicitudes de protección por parte de los migrantes.
“Las demandas de esta caravana es que el Senado entregue más presupuesto a la Comar, que se retire el ejército de las calles y que el Gobierno de Honduras sea más responsabilidad con sus connacionales” lanzó el defensor.
En su recorrido por Chiapas, el viacrucis pretende hacer escala en los Municipios Huixtla, Mapastepec y Pijijiapan, y abordar en algún momento el tren conocido como La Bestia para seguir hacia Oaxaca, Veracruz, Puebla, Ciudad de México y posteriormente enfilarse hacia los Estados Unidos.
Mujica sostuvo que las políticas de los Gobiernos de México y Estados Unidos, como el muro fronterizo, no detendrán la migración.