A pleno rayo de sol, pero con una gran devoción y fe, decenas de fieles católicos se reunieron en el cerro de La Cruz, en la comunidad de Plateros, para la bendición de la imagen de siete metros del Santo Niño de Atocha.
El obispo de la Diócesis de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló y monseñor Antonio Soto Guerrero, acompañados del presidente Saúl Monreal Ávila y su esposa Lupita Pérez Vázquez, presidenta honorífica del Sistema Municipal para el Desarrollo Integral de la Familia (SMDIF), llegaron hasta el cerro a bordo del Fresnibus luego de concluir una misa en el santuario del santo Niño de Atocha.