Rubén Ibarra Reyes, rector de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), reconoció que tras el regreso a clases presenciales se ha detectado que hay rezago en los jóvenes estudiantes, mismo que será visible en las generaciones de egresados.
Tras dos años de pandemia, en los que la máxima casa de estudios no tuvo actividad presencial, el rector expuso que no se tiene medido el nivel de rezago; “pienso que no lo tenemos medido ni nosotros ni nadie, ese rezago que se verá en las generaciones de egresados en los próximos años”.
“Por supuesto, hay una dificultad, fueron dos años en los que jamás se va a poder sustituir la actividad presencial a una computadora”, puntualizó.
Ibarra Reyes afirmó que ya existe un plan para contrarrestar los efectos que dejó la pandemia en el rendimiento de los alumnos. Adelantó que del 17 al 19 de mayo habrá una cumbre mundial de universidades públicas, donde el tema principal será cómo abatir los problemas de rezago.
En ese sentido, la UAZ va a proponer que se profesionalice a los docentes “para que desarrollen nuestras estrategias de enseñanza”.
Además de que se buscará adaptar la educación a las nuevas necesidades de las empresas, que es a donde las nuevas generaciones de egresados buscan acceder para ejercer su profesión.
Expuso que, tras el regreso a clases, todos los maestros de las diferentes carreras se están mostrando flexibles con aquellos alumnos que todavía tienen alguna dificultad familiar o económica que les permita estar de lleno en las aulas.