FRESNILLO. Niños, mujeres, hombres y familias completas acudieron a la explanada del tempo de Guadalupe para encender veladoras y formar una cruz afuera de la iglesia, como muestra de la indignación por el pequeño de tres años que murió alcanzado por una bala, en un ataque armado en ese lugar.
Las personas se comenzaron a reunir frente al Santuario de la Virgen de Guadalupe, después de que el sitio fue liberado por las autoridades, y se mantuvieron ahí por varios minutos, orando por la víctima.
Una joven que acudió a este espacio religioso colocó un oso de peluche pequeño, con un globo y juguetes. Quienes estaban ahí reunidos pedían justicia: “basta de tanta muerte en Fresnillo”.