El Centro Empresarial de Zacatecas, Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), lamentó “la situación en la que vivimos, desde hace mucho tiempo, los ciudadanos Zacatecanos frente a la violencia e inseguridad”.
En comunicado de prensa, el órgano empresarial indicó que “es importante recordar que aunque la inseguridad es un tema colectivo, jamás deja de ser un asunto de Estado”.
En el diagnóstico califica la situación que se vive en la entidad como inédita, pues “la violencia ha incrementado lo suficiente para ubicarlo como uno de los tres principales problemas que aquejan a la entidad, a su ciudadanía”.
A decir de Coparmex, Zacatecas se encuentra “en un estado de indefensión, vulnerabilidad y riesgo en todo sentido” y ha sido escenario de un aumento desmedido de violencia desde hace varios años, encontrándose ahora en su punto máximo, “en el que la actividad criminal es la constante de la vida diaria”.
Critica además que las estrategias para combatir el problema de la inseguridad que han transitado, materialmente, por la vía del refuerzo de activos policiales y fuerzas armadas en el estado, en la persecución y castigo, “el enfoque de esta estrategia ha sido fundamentalmente de reacción y punición”.
Advierten, además, que atender el problema bajo un esquema puramente reactivo “es una visión muy sesgada del fenómeno de la violencia”.
Por ello, aluden que “frente a la omisión de nuestras autoridades locales por atender la violencia, desde este centro empresarial elaboramos un documento que señala algunos datos importantes y, de manera muy general, algunos posibles caminos para atender este fenómeno”.
En el documento titulado: “Diagnóstico inicial de Seguridad Pública: Prevención del Delito”, abordan los temas: La seguridad pública y el Estado, la prevención: el nuevo ideal, la participación ciudadana, el papel del sector privado en la prevención del delito.
Además de realizar un diagnóstico con cifras nacionales de inseguridad, la actuación del Estado, el origen de la cris de inseguridad y consideraciones finales.
De acuerdo con el diagnóstico, “Zacatecas ha sido uno de los principales escenarios en esta ola de violencia tan grave por la que se atraviesa. A lo largo de estos años, el estado se ha mantenido en el ojo del huracán, debido al incremento de los actos violentos que ponen en riesgo a la ciudadanía”.
Señalan que el aumento de la violencia es más de 400 puntos porcentuales en los últimos seis años, “y parece no mostrar una tendencia de reducción en el inicio de este”.
Señalan que el grueso de los delitos se concentra principalmente en tres municipios: Fresnillo, Zacatecas y Guadalupe. “Sin embargo, hay algunos otros focos rojos en el estado, tales como: Jerez, Calera, Valparaíso, Jalpa, Juchipila, Ojocaliente, Luis Moya, Villanueva, Pinos, Loreto, Río Grande, Sombrerete, en los que se han presentado tendencias delictivas notorias”.
Los empresarios zacatecanos mencionan que una de las principales razones por las que Zacatecas es tan atractivo para el crimen organizado, es la ubicación geográfica del estado.
Esto por estar ubicado en la zona centro-norte del país, y tiene colindancia con ocho estados: Durango, Coahuila, Nuevo León, San Luis Potosí, Guanajuato, Jalisco, Nayarit y Aguascalientes.
En este contexto dice Coparmex “las estrategias de seguridad implementadas por los gobiernos han sido poco efectivas para combatir en el corto y mediano plazo las consecuencias tan graves de la llegada de los grupos criminales al estado, con todo lo que ello implica”.
Por ello se dicen preocupados y dicen que en este momento es necesario ocuparse en buscar estrategias que permitan alcanzar niveles de vida deseables, a partir de un desarrollo humano digno, en el que la seguridad sea el pilar fundamental.
En las consideraciones finales advierten los empresarios que “este tratamiento del problema de seguridad ha sido, además, insuficiente, en tanto la violencia ha seguido creciendo sin control, generándose un problema cada vez más insostenible para el Estado”.
Señalan también que en la entidad “es necesaria la implementación de un sistema de prevención del delito que fusione las dos corrientes: penal y no penal”.
Por ello, se hace un llamado al gobierno del estado a fortalecer esta iniciativa e incluir a la sociedad zacatecana y al sector productivo, “a formar parte de los trabajos encaminados hacia la prevención social de la violencia que nos compete a todos”.