FRESNILLO. Los productores de nopal de Fresnillo optaron por usar su producto para consumo humano y forrajes luego de que durante la contingencia sanitaria la producción y las ventas cayeron.
Recordaron que la producción de nopal se fue a la baja desde el cambio de gobierno a nivel federal, ya que desde entonces los apoyos para este sector se terminaron.
“Ya le hemos buscado más por el lado de la alimentación de ganado, que es donde se va la mayor parte y sí, ya nos están comprando”, precisaron.
Antes de la contingencia sanitaria, la cosecha se vendía con otros fines y era exportada a otros estados y vendían por planta o penca, por lo que había mejores ganancias. El precio pasó de tres pesos por penca a 80 centavos por kilo.
“Dejó de haber mercado para la planta” y detallaron que, incluso, hubo disminución de productores por la falta de compra-venta.
Antes de la pandemia, la producción alcanzaba hasta mil kilogramos por hectárea, mientras que ahora son sólo entre 600 y 800 kilogramos.
“Antes se estaba vendiendo mucha planta a Chihuahua, Durango, Colima, Tamaulipas y Coahuila. Tampoco allá hay programas”, informaron.
“El gobierno abandonó al campo, absolutamente todos los programas se fueron para abajo”, lamentaron.
Antes de la pandemia y del cambio de gobierno, el sector crecía 30 por ciento cada año, pero a partir de la contingencia sanitaria paró el desarrollo y, aunque no abandonan la producción, es cada vez menor.
A la par y al igual que en el resto de los sectores agropecuarios se enfrentan al aumento en los costos de diésel, fertilizantes y plaguicidas, pero a diferencia de otros productos como el frijol o el chile, en el nopal no hay forma de incrementar los precios, debido a que no hay mercado.
Deficiencias
Falta de apoyo por gobierno federal
El precio por penca pasó de 3 pesos a 80 centavos
Falta de mercado
Ya no hay crecimiento, después de que fuera 30% por año
Aumento de costos en insumos