VALPARAÍSO. Por recortes presupuestales, la Caravana de Salud Itinerante a cargo de la Secretaría de Salud de Zacatecas (SSZ) sólo realizó tres visitas durante 2022 a las comunidades de la sierra cuando debió hacerlo cada mes.
Además, apenas hace dos meses llegó un médico titular a la clínica de Ameca El Viejo, luego de permanecer sin servicio todo el año, informó Claudia Simonita Ramos Leal, presidenta del Sistema Municipal para el Desarrollo Integral de la Familia (SMDIF).
Informó que ante el abandono del sector salud para estas zonas que se concentran en las comunidades Santa Lucía de la Sierra, Ameca El Viejo y San Antonio de Padua, el SMDIF suplió con jornadas semanales este importante servicio que exigían los habitantes.
Enfatizó que las Caravanas de Salud anteriormente realizaban una visita mensual por obligación y en los recorridos eran beneficiados pacientes con enfermedades crónico-degenerativas, embarazadas y otro tipo de afecciones.
Sin embargo, este año los recortes presupuestales obligaron a reducir las caravanas con la frecuencia acostumbrada, “la misma población se quejó de que los visitan si acaso dos o tres veces al año y eso cuando fueron las jornadas de vacunación”, dijo.
Suple SMDIF servicio
Ante la situación de abandono por parte de la SSZ, el Ayuntamiento de Valparaíso realiza una aportación anual aproximada de 200 mil pesos para la adquisición principalmente de medicamentos.
Además, cuenta con una donación importante que hacen médicos particulares, con lo que el SMDIF realiza jornadas médicas cada miércoles, en las que habitantes de las rancherías cercanas acceden a servicios de psicología, nutrición, fisioterapia, medicina general y dental.
Al preguntarle a Ramos Lealsi la secretaría de salud tiene abandonados a los pobladores de esas regiones respondió “sí los tienen abandonados”, por lo que el gobierno municipal trata de garantizar la atención médica, principalmente en las zonas más alejadas.
Además, detalló que hace tres años se remodeló de manera integral la clínica de Ameca El Viejo y se llevó “equipamiento que muchos consultorios quisieran”; sin embargo, por la inseguridad, no había médico que quisiera asentarse en ese lugar, pues la lejanía era otro inconveniente.
Recordó que de Valparaíso a Las Amecas son tres horas de camino y las condiciones de la terracería son deplorables.
Comentó que en Santa Lucía, así como en San Antonio de Padua las rancherías de los alrededores sí cuentan con médico; sin embargo, las jornadas del SMDIF no dejan de llevar los servicios adicionales de psicología, nutricional, dental y fisioterapia.
De igual forma, puntualizó se ha dado atención a cerca de 900 familias durante el año en distintas comunidades.