La detención de un estudiante de secundaria por llevar una pistola a la escuela y amenazar con ella a un compañero es sólo la punta de iceberg, pues estudios reflejan que cada día es mayor el número de alumnos que portan armas y consumen drogas en los planteles, reconoció el subsecretario de Prevención Social del Delito, Manuel Ibarra Santos.
Esta situación es muy preocupante, según Cristela Trejo Ortiz, abogada y defensora de los derechos de niños, niñas y adolescentes, ya que demuestra lo fácil que es para los adolescentes conseguir armas de fuego.
Cambiar estrategia
Manuel Ibarra precisó que, ante la situación de violencia que se padece actualmente, el Programa Nacional de Convivencia Escolar se quedó corto, por lo que es necesario que se refuerce con más dependencias de gobierno.
El funcionario explicó que, además de que creció la cantidad de estudiantes que portan armas al interior de las escuelas, cada día es mayor el número de los que utilizan drogas.
Por ello, advirtió que es necesario trabajar en estrategias para garantizar que los espacios educativos sean ambientes adecuados para el sano desarrollo de los alumnos.
Los profesores deben enfocarse en la enseñanza, resaltó, por lo que corresponde a las secretarías de la administración estatal intervenir con acciones para mejorar el ambiente escolar en cada institución educativa.
En esta gran cruzada deberán involucrarse instituciones como el Instituto de Cultura Física y Deporte del Estado de Zacatecas (Incufidez) y el Consejo Zacatecano de Ciencia Tecnología e Innovación (Cozcyt).
En tanto, la Secretaría de Salud de Zacatecas (SSZ) deberá comandar la estrategia y coordinar los esfuerzos de todas las dependencias, a fin de que los alumnos tengan una mejor convivencia y desarrollo más armónico.
Sin sanciones
Cristela Trejo calificó como alarmante que un estudiante llevara a la escuela un arma sin medir las consecuencias, pues advirtió que el razonamiento que está detrás de esa acción es que no hay una sanción.
“Si yo comento un delito no hay sanción para nadie, pues hay desaparecidos y están matando en la calle”, reflexionó la especialista.
Por ello, coincidió con Ibarra Santos en que es necesario que se haga un cambio en la estrategia de prevención antes de que se normalice esta situación, como son las crecientes cifras de homicidios y de desapariciones de personas.
El caso del estudiante se deberá seguir de oficio, pero también se le debe brindar una atención integral tanto al adolescente infractor como a los alumnos que fueron testigos de esos actos.
“Si no se les da apoyo a esos jóvenes vamos a dar una lectura de que, en este país, la impunidad y la corrupción están al alza”, insistió.