Los perniciosos riesgos del cisma berdejista en Coahuila
Me temo que no es tan sencillo, haces demasiado caso de tu sentimentalismo y tu descontento, por no ser capáz de morir
Yusanari Kwabata
El 12 de diciembre del año pasado el Presidente del CEN de MORENA, Mario Delgado Carrillo, hizo público el resultado de la encuesta que definió que el Senador Armando Guadiana Tijerina ostentará el encargo de Coordinador Estatal de Comités de Defensa de la 4T. Acto seguido el resultado fue convalidado por otro de los aspirantes, Luis Fernando Salazar; no obstante el ahora ex titular del secretariado ejecutivo de la Secretaría de Seguridad Pública y Ciudadana, Ricardo Mejía Berdeja no hizo lo propio, con las consecuencias que esta postura, ha generado.
Finalmente después de este frenesí de declaraciones y amenazas el pasado lunes 17 de enero, el Presidente López Obrador informó en su conferencia matutina que Mejía Berdeja, había entregado su renuncia, “sin despedirse”. Más tarde el propio ex subsecretario publicó un video en el que compartió el motivo de su renuncia, que contenderá por la gubernatura en el estado de Coahuila, por el Partido del Trabajo y que lo hizo llevando el orden de jerarquías para concluir con una serie de insultos a la dirigencia nacional de MORENA.
Derivado de esta secuencia de hechos habría que tomar en cuenta algunas consideraciones y prever algunos efectos adversos para la 4T, para MORENA y para la, en algún momento posible, derrota del priato y el moreirato en la tierra de Madero y Carranza.
Consideraciones
- En un primer momento Mejía Berdeja había aceptado ceñirse al novedoso método a través del cual se eligen los candidatos en MORENA, la encuesta.
- La encuesta mide al personaje que cuenta con mayor identificación, así pues independientemente de filias o fobias Guadiana ha sido candidato de MORENA, a gobernador de Coahuila, a presidente municipal de Saltillo y Senador electo; participaciones que le han dado mayor exposición pública que se tradujo en identificación.
- Mejía Berdeja realizó un importante trabajo de posicionamiento que le permitió colocarse en el ámbito estatal; sin embargo, este ejercicio lo realizó en tiempos recientes, en tanto que apenas hace algunos meses regresó de una larga estadía en Guerrero causada por sus añejas diferencias y riesgos con respecto de los hermanos Moreira.
Aunque en política no conviene hacer conclusiones absolutas, lo cierto es que, pese a que los resultados de las encuestas en los últimos meses daban la victoria a MORENA, con la decisión de contender por el PT, Mejía Berdeja lamentablemente está provocando un cisma al interior de los militantes y simpatizantes del movimiento de la 4T y los de MORENA, por un lado los guadianistas y por el otro los berdejistas. Situación que además de cancelar toda posibilidad de que la 4T llegue al estado norteño, se estarían entregando todas las condiciones para perpetuar el moreirato que tanto daño ha hecho a esa entidad.
Ningún método democrático es perfecto, ni siquiera el asambleísmo, por lo que quizá sea válido disentir del método, de sus términos o de su fiabilidad. En MORENA el método de la encuesta se ha ido perfeccionando para dar certeza a los interesados en los procesos internos, sobretodo porque será el mismo que defina el candidato a presidente de la República para 2024. Sin embargo, las inconformidades en torno al método debieron plantearse antes de la participación en el mismo, no cuando el resultado no favoreció a alguno de los encuestados; por lo que definitivamente lo que está fuera de lugar son los reclamos posteriores, señalamientos e insultos, hacia la dirigencia nacional de MORENA, los cuales, en todo caso, podrían estar infundados merced al estado de ánimo de quien ve truncadas sus aspiraciones.
Lo que también deja en evidencia la mencionada decisión es que, aunque el berdejismo creció rápidamente, se trata de una aspiración totalmente personal del ex subsecretario, ya que pasó por alto las previsibles consecuencias. Y aunque en el mensaje pronunciado se apela a la lealtad al proyecto y al presidente la realidad del hecho demuestra lo contrario.
Finalmente, la historia juzgará el desenlace de este proceso, lo cierto es que en este momento Coahuila se está alejando de la inmejorable oportunidad de hacer posible la transformación.