ZACATECAS. El novillero zacatecano César Pacheco se recupera satisfactoriamente de la grave cornada que sufriera en el paladar durante su actuación en la plaza de toros La Florecita, de Atizapán de Zaragoza, Estado de México.
Han sido semanas de lucha constante, de paciencia, pero sobre todo de aferrarse a su profesión, sabiendo que lo mejor está por llegar.
Reposo absoluto y sin salir de casa, fueron las indicaciones del equipo médico encabezado por el doctor. Jorge Uribe, que a la letra siguió Pacheco, quien aprovechó este tiempo para fortalecer la mente y espíritu.
Será en tres semanas más, cuando de nueva cuenta el novillero sea valorado y entonces pueda llegar el alta médica para así volver a sus entrenamientos y preparar el terreno para continuar con su temporada.
“Me siento contento, este fin de semana hablé con el Dr. Jorge Uribe y me dijo cosas esperanzadoras así que espero el paso de estas tres semanas. Extraño mucho entrenar, el ritmo de preparación, y torear, pero entiendo la magnitud de la cornada que no fue en un lugar común. Aunque al principio fue complicado, antepuse mi futuro, mi carrera, y sobre todo mi salud, y desde el día uno seguí todas las indicaciones”, compartió el novillero a NTR Toros.
El paso de los días ha nutrido la mente del zacatecano, que hoy más que nunca tiene claro a dónde quiere llegar, y así, con objetivos claros se dedicó a leer, ver videos, todo relacionado con la tauromaquia.
El deseo por vestir de nueva cuenta el terno de luces le llana de ilusión, lo motiva a dar el paso siguiente, confiando en que el 2023 marcará su carrera novilleril.
“Lo más importante de todo es, que este tiempo que he estado en casa me ha servido mucho para reflexionar, para leer, para ver vídeos, estoy seguro de que eso va a ayudar a mi toreo, a llevarlo a otro extremo, a llevarlo a un punto más maduro. Ya estoy loco porque me den el alta médica y pueda entrenar y torear una vez más”, concluyó Pacheco, quien nos mantendrá al tanto de su evolución.