El ex rector de la Universidad de Guadalajara y presidente de la Feria Internacional del Libro, Raúl Padilla López, se quitó la vida, posiblemente en la mañana de ayer, en su domicilio ubicado en la colonia Vallarta Poniente, a cuatro cuadras de la glorieta Minerva, al oeste de Guadalajara.
La Fiscalía del Estado informó oficialmente que recibió la noticia y “arribaron al sitio las autoridades ministeriales, quienes confirmaron el hecho. De forma preliminar fue localizada en la escena un arma de fuego, así como un recado póstumo; indicios que se integrarán a la carpeta de investigación”.
De acuerdo con versiones cercanas al círculo del dirigente universitario, Padilla López padecía una enfermedad severa cuyo cuadro se había tornado altamente agresivo en las últimas semanas, lo que podría estar detrás de una toma de decisión tan aparentemente abrupta.
No se ha dado a conocer el contenido del mensaje póstumo, que muchos universitarios consideran esencial para la casa de estudios, pues la relevancia del ex rector en la vida de la institución difícilmente se puede exagerar.
Padilla López estaba a punto de cumplir 69 años de edad y ejerció la rectoría de la casa de estudios entre 1989 y 1995. Fueron años de una profunda reforma administrativa que quitó el poder a la Federación de Estudiantes de Guadalajara (FEG) y dañó su relación con el anterior rector, Enrique Alfaro Anguiano, padre del hoy gobernador Enrique Alfaro Ramírez.
En estos momentos, el gobernador de Jalisco mantiene una agenda de enfrentamiento con el grupo político que encabezó Padilla López, aunque, asegura, “no con la universidad”.
El gobernador, quien está convaleciente tras un problema de salud, informó que se comunicó para expresar sus condolencias con Trinidad Padilla, hermano de Raúl, y con Ricardo Villanueva Lomelí, rector de la UdeG.
Una de las dudas es si la ausencia de Padilla López elimina el conflicto. Se espera que en breve fije una postura el Consejo General Universitario. La universidad ha interpuesto controversia contra el gobernador por su presunta intromisión en la vida institucional de la casa de estudios.
La Universidad hizo público su duelo por el fallecimiento del ex rector. Bajo su liderazgo, “la Universidad de Guadalajara se transformó para convertirse en la segunda universidad más grande de México”.
El rector Ricardo Villanueva expresó en redes sociales que la muerte de Padilla representa un día triste para la comunidad universitaria.
“La historia de Jalisco tiene un antes y un después de Raúl Padilla. Nuestro estado nunca más volvió a ser el mismo después de la Reforma a la Ley Orgánica de la Universidad de Guadalajara que impulsó, y las dinámicas que generó en los ámbitos de la educación, la investigación científica, la cultural, los derechos humanos y el desarrollo regional”, dijeron a NTR los académicos del Centro Universitario de la Costa Sur, Enrique Jardel Peláez y Eduardo Santana Castellón.
La creación de los centros universitarios “fue resultado del proceso de Reforma Universitaria encabezado por el entonces rector de la Universidad de Guadalajara, que promovió la creación de Centros Universitarios regionales, abriendo la oportunidad para que jóvenes del interior del estado de Jalisco tuvieran acceso a la educación profesional y de postgrado. Esta reforma permitió que más del 80 por ciento de los alumnos de la UdeG provengan de las familias de menores ingresos del estado.
También detonó el desarrollo socio-económico en las regiones donde se crearon los centros universitarios. Los alumnos no tuvieron que viajar a la capital, y los centros universitarios atrajeron población externa”, añadieron.