NORIA DE ÁNGELES. Los fieles de la parroquia de Noria de Ángeles, en su mayoría niños, participaron en un Vía crucis, cuyo distintivo fue portar cruces como muestra de lo que la población ha sufrido por los hechos de inseguridad.
El responsable de la parroquia de la Purísima Concepción, el padre Marcos, convocó a todas las comunidades, tanto de Noria de Ángeles como las pertenecientes a Villa González Ortega, para participar en el Viernes de Dolores “por la paz y la seguridad de México”.
Si bien el sacerdote consideró que no fue fácil salir a las calles por las condiciones de inseguridad, logró que niños y adultos se unieran para rezar.
“No hay mucho por hacer porque nos ha rebasado la situación, pero una gota de amor nunca está de más”, expresó.
Lamentó que la República esté secuestrada y en llamas, por lo que pidió resolver, entre todos, los verdaderos problemas.
Afirmó que en esta coyuntura “estamos pagando lo que fuimos creando. Dejamos todo el peso en las manos de unos cuantos. Grave error. Aunque hay muchos justos que son inocentes”.
Deseó que Dios bendiga a la gente de Noria de Ángeles y de los alrededores, a los migrantes y todas las personas que han enfrentado el problema de la inseguridad en el país y en el estado.
El sacerdote reconoció que en los últimos días se han registrado “situaciones desfavorables”, por ejemplo, la cancelación, en dos ocasiones, de la Asamblea de Pastoral y así como la hora santa, la misa oficial y los ejercicios cuaresmales de los niños.
Debido a esto, pidió que en esta temporada de vacaciones, quienes planeen salir, lo hagan con la precaución debida.