ZACATECAS. La tarde de este jueves fue inaugurado un altar a la Santa Muerte en la calle tiro San Bartolo de la colonia Francisco E. García, en la capital.
Silvia Mejía Romo, devota al culto desde hace quince años, detalló que nunca planeó obtener una imagen de dos metros, simplemente quería una escultura para complementar su retablo personal.
Puntualizó que todo comenzó por una solicitud de una imagen en un local del mercado arrollo de la plata, donde el comerciante le explicó que días más adelante le llegaría mercancía, cuando le confirmaron que su escultura había llegado, agregaron que no la podían conservar en el local porque era de dos metros. Explicó que eligió tenerla en su hogar, y como forma de agradecimiento le dedicó un lugar especial.
Insistió en que no tiene la intención de lucrar con el pequeño santuario que adaptó, sólo es para que quien comparta la creencia pueda acudir al lugar a realizar sus rezos o agradecer por los favores concedidos.
Mejía Romo describió que su creencia a la Santa Muerte nació gracias a un milagro concedido, ya que le encomendó la salud de su hijo, quien estaba delicado, y al curarlo comenzó a compartir este dogma. Además, expuso que ella respeta a todas las religiones y no trata de convencer a quien no crea.
Ostentó que en su familia su esposo no es creyente y sus hijos por decisión propia han ido acercándose.
Exteriorizó que a pesar de la polémica que se generó en torno a la revelación esta figura, es respetable la decisión de cada persona y que no por creer en esta efigie se les debe criminalizar a las personas que sigan este credo.
Entre danza y oraciones fue que en punto de las 18 horas se abrieron las puertas para revelar la capilla adaptada —en lo que en su momento fungió como cochera—, para así darle cabida a fieles que acudieron para honrarla.
Tal es el caso de la señora Máyela Castillo Rivera, quien se enteró por medio de redes sociales que se realizaría esta celebración y acudió para agradecer a la “Santa” por los favores recibidos al mejorar el estado de salud de su cónyuge e hijo quienes presentaron problemas de salud.
FOTOS: JESSE MIRELES