ZACATECAS. De 98 hombres detenidos por violación equiparada de 2020 a 2022, nueve fueron adolescentes y, por su edad, los hubo que no ameritaron el ingreso al centro de internamiento para menores.
Ruth Lucio Sánchez, magistrada del Tribunal Especializado en Justicia para Adolescentes, explicó que las sanciones dependen del grupo etario. El primero va de los 12 hasta antes de los 14 años y en este rango no reciben como castigo la medida de internamiento.
Luego, si un adolescente tiene entre 14 años cumplidos y menos de 16, es decir, en el segundo grupo de edad, se le recluye por tres años máximo.
El tercer sector corresponde a los que tienen de 16 a menos de 18 años, a quienes se les puede sancionar con hasta cinco años de internamiento.
Según datos de la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE), en agosto de 2020, un niño de 12 años fue detenido por el delito de violación equiparada y en el mismo mes, pero de 2022, fueron dos menores de 12 y 13, junto con otro de 15, a quienes se les involucró en la misma causa penal.
Cuando no procede el castigo de internamiento por la edad, las sanciones pueden ser la amonestación, prestación de servicios en favor de la comunidad, prohibición de asistir a determinados lugares, abstenerse de viajar, supervisión familiar e integrarse a programas especializados cuando se trata de delitos sexuales, entre otras.
Sin antecedentes
“La aspiración del sistema es que no vuelvan [a delinquir]”, afirmó Lucio Sánchez. Además, para los menores procesados “no hay antecedentes penales porque el sistema considera que son personas en desarrollo y no cargan con ese peso, porque llevaría a una estigmatización frente a la sociedad”.
Las órdenes de internamiento suelen ser para los delitos más graves y, actualmente, en el centro de detención para menores ubicado en Villanueva hay 57 jóvenes que cometieron delitos del fuero común, principalmente secuestro, homicidio y violación. Otros 33 internos incurrieron en delitos contra la salud y portación de armas.
“Es prioritario para nosotros, como autoridades, darles una atención especializada para el tratamiento de sus medidas sancionadoras”, insistió la magistrada del tribunal de justicia para adolescentes, quien reiteró la importancia de la prevención.
Lamentó que haya grupos delincuenciales que utilicen a jóvenes de hasta 17 años, sabiendo que la máxima condena que les pueden imponer es de cinco años. “Es lo que estamos viviendo en nuestra entidad. […] La situación creo que debiera ser preocupante”.