Desde hace meses padecen por la falta de agua los casi 2 mil habitantes de la comunidad El Copetillo, de Villa García, ubicada a 120 kilómetros de la capital zacatecana. En plena ola de calor les duplicaron el precio de las pipas y, desesperados, piden apoyo gubernamental.
Este miércoles, Lucía Monreal Monreal, habitante de la localidad del sureste, recorrió casi 100 kilómetros hasta Cerrito de la Cruz, en Ojocaliente, para exigir al gobernador David Monreal Ávila que los apoyen para tener agua potable.
La mujer relató que desde hace cuatro meses carecen del recurso en su localidad, donde viven aproximadamente 2 mil personas. Quienes más padecen son los niños que van a la escuela y han enfermado por beber agua de mala calidad.
Entre lágrimas de desesperación y tristeza, denunció que al alcalde Bárbaro Flores Lozano no le importa el problema que enfrentan, pues a pesar de sostener reuniones con regularidad no ha brindado apoyo a El Copetillo.
El presidente municipal solo promete que enviará pipas de agua, pero no cumple, y si ha llegado ayuda es del estado de Aguascalientes, expuso Lucía Monreal.
Ella logró llegar hasta el presídium de un evento organizado para entregar apoyos, donde estaba el gobernador, para demandar que voltee a ver a su pueblo.
“Aunque sea una comunidad alejada es parte de Zacatecas y está olvidada por los gobiernos estatal y municipal”, reprochó.
Explicó que para contrarrestar el desabasto inicialmente contrataron pipas que cobraban 900 pesos por distribuir 10 mil litros de agua, pero actualmente aumentaron la cuota a 2 mil pesos.
Por eso, la afectada decidió acudir a la gira de David Monreal para plantearle el problema y pedirle que facilite el envío y distribución del recurso natural.
Desesperados
Lucía Monreal insistió en que la preocupación se agrava por los infantes, porque son aproximadamente 800 que ante la escasez han bebido agua de una noria, de la que se desconoce la calidad, por lo que ya se tuvieron casos de padecimientos estomacales.
Aclaró que no han sido cuadros clínicos graves, pero siempre se corre el riesgo de no contar con lo necesario para la atención médica y que surjan complicaciones con los menores.
Advirtió que la desesperación ya invadió a la población al no ver respuestas. Por más que oran y suplican que llueva o haya algún indicio de solución, “el clima tampoco ha favorecido para que los pozos y bordos almacenen un poco de agua”.
Se tenía la creencia, resaltó la mujer, de que la energía eléctrica era un servicio fundamental, pero ahora descubrieron que no es así, que el más importante es el agua.
Finalmente, adelantó que los pobladores agotarán todas las instancias y, de ser necesario, viajarán a Aguascalientes, a una distancia de 50 kilómetros de la localidad, para solicitar ayuda a la gobernadora María Teresa Jiménez Esquivel.
Luego de conocer el caso, David Monreal dijo que revisaría el problema y buscaría visitar la comunidad para conocer las medidas que deban tomarse; además, pidió a una de sus asistentes solicitar datos a la señora Lucía.
La trabajadora gubernamental se comprometió a tener comunicación para darle aviso de las acciones a implementar y la habitante del Copetillo aseguró que dará un voto de confianza al mandatario para que pueda resolverles el problema de falta de agua.