RÍO GRANDE. Tras el colapso del puente Hidalgo, el alcalde Mario Córdova Longoria advirtió que hay más en riesgo, mientras que la Secretaría de Obras Públicas (SOP) confirmó que lo mismo ocurre en otros municipios, como Valparaíso y Chalchihuites.
Este miércoles, autoridades federales y estatales visitaron Río Grande para realizar una revisión luego de que la noche del martes colapsara el Puente Miguel Hidalgo, construido hace casi 77 años y que era el principal cruce sobre el río Aguanaval.
La conclusión fue que se tendrá que demoler la construcción para dar paso a una nueva obra, según lo anunció el gobernador David Monreal Ávila; sin embargo, ni la administración del estado ni la municipal cuentan con los recursos para ello.
Daño a la economía
Mario Córdova aseguró que todos los puentes del municipio presentan fallas y tendrán que realizarse inversiones para estudios estructurales y evitar más derrumbes. Ejemplificó que el ubicado en las canchas de basquetbol tiene observaciones desde 2017 por riesgo de derrumbe.
Sin embargo, tanto éste como el Miguel Hidalgo nunca recibieron mantenimiento desde que los inauguraron. En esta omisión, enfatizó el presidente municipal, “hay una responsabilidad conjunta, de todos”.
Expuso que el puente colapsado fue un detonante para el desarrollo de Río Grande, que se ubica a 139 kilómetros de la capital, porque significa la conexión con nueve municipios. Ahora se complica la movilidad de productores sobre esta vía, en la que circulaban por lo menos 200 mil personas.
Córdova Longoria reconoció que preocupa el daño a la economía por la construcción de otra estructura desde cero, porque es como retroceder en el tiempo al quedar sin conexión con la región, donde las principales actividades son la agricultura, la ganadería, el comercio y los servicios.
Anunció que una empresa externa realizará un estudio para determinar las causas del colapso. “En este momento no quiero verme imprudente en hacer señalamientos, porque hay muchos, pero quiero ser sensato”, puntualizó.
Proyectan nuevo cruce
David Monreal afirmó que “el dinero es lo de menos en una contingencia como esta”. No es porque los recursos sobren, abundó, sino porque se tiene que disponer de fondos propios y reorientar el gasto de obra pública o, en el peor de los casos, mezclar capital entre los tres órdenes de gobierno.
“Vamos a demoler todo el puente y construir uno nuevo, con nuevo diseño de movilidad, que esté a la altura; lo más importante es volver a dotar de este servicio al pueblo de Río Grande”, anticipó el gobernador al recorrer el lugar acompañado por elementos de la Fuerza de Tarea Genaro Codina.
Detalló que el nuevo cruce tendrá mayor capacidad vehicular, un paso peatonal y, posiblemente, hasta ciclovía. Además, para garantizar la mayor durabilidad, en coordinación con el ayuntamiento se regulará el tránsito de vehículos pesados y la extracción de materiales pétreos.
Monreal Ávila agregó que ya existe un estudio de las condiciones de los puentes en todo el estado, que muestra la necesidad de mantenimiento. Aunque nunca hay recursos suficientes, se tiene que buscar la forma ante la necesidad, insistió.
Guillermo Carrillo Pasillas, secretario de Obras Públicas del estado, informó que se tienen ubicados puentes en riesgo de colapsar en Valparaíso y Chalchihuites, pero el incidente de Río Grande encendió alarmas para agilizar intervenciones ante la temporada de lluvias y evitar más derrumbes.
Reunión de trabajo
Luego del recorrido, las autoridades se reunieron y acordaron medidas como la revisión de las viviendas cercanas a los márgenes del río Aguanaval, especialmente aquellas que carecen de la infraestructura adecuada y se encuentran en riesgo de inundación.
“Hoy nos estamos adelantando en la prevención”, subrayó David Monreal, luego de manifestar su reconocimiento y gratitud a la titular de la Secretaría de Energía (Sener), Rocío Nahle García, quien se comunicó para expresar su voluntad de ayudar a sus paisanos de Río Grande.
Entre los acuerdos, además de planear la construcción de un nuevo puente, se realizarán labores de desazolve sobre el caudal del río y un diagnóstico de las zonas de riesgo sobre las riberas, colonias y casas.
También se declaró permanente la mesa de prevención y se llevará a cabo toda una supervisión de los puentes. Otro de los objetivos es generar todo un plan de movilidad vial y, a partir del lunes, iniciar la demolición del puente.