La Subsecretaría de Transporte solo cuenta con tres inspectores para cubrir el estado y, ante la falta de delegaciones municipales, no existen las condiciones para verificar el estado de las unidades ni atender todas las quejas de usuarios.
Javier Reyes Romo, subsecretario de Transporte, reconoció que al llegar al cargo encontró un área desordenada, con rezagos administrativos y con pequeño alcance para atender las necesidades de las 58 demarcaciones.
Después de la separación de vialidad, “a la subsecretaría de Transporte la dejaron como una pequeña oficina.
“No tenemos ojos ni manos en los municipios, no tenemos oficinas de atención para que los transportistas y los usuarios puedan presentar una queja por el transporte”, puntualizó.
Reyes Romo aceptó que en movilidad también han dejado de tomar acciones: “tenemos que evolucionar, porque en comparación con otros estados nos hemos quedado atrás, Zacatecas se ha quedado rezagado”.
La falta de vigilancia permite que en lugares como el cañón de Tlaltenango circulen de manera irregular mototaxis, los cuales están prohibidos en la entidad.
“Hemos realizado varios decomisos de estas unidades, pero como no existen delegaciones en ningún municipio, no podemos tener un control sobre este tipo de transporte”, reconoció.
El subsecretario de Transporte resaltó que la complejidad del problema es que se tienen 6 mil 400 concesiones, divididas en 13 modalidades, pero solo tres inspectores y todos los días se reciben quejas.
Ante la falta de personal, solicitaron al gobernador David Monreal Ávila la posibilidad de tener más responsables de la vigilancia del transporte en la entidad, “también estamos planteando la generación de siete oficinas regionales con la idea de dar cobertura a todo el estado”.
Reyes Romo expuso que hay conflictos en toda la entidad, “por ejemplo Fresnillo, que es una ciudad con un complejo servicio de transporte y requiere mucho orden. Al igual que en la zona conurbada, que está desbordada, el bulevar ya no aguanta más, está a tope”.
Mencionó que diariamente recorren el bulevar metropolitano 600 taxis, para el transporte urbano cerca de 300 camiones de diferentes modalidades y el tránsito habitual de autos particulares, “lo vivimos todos los días, lo complejo que es transitar”.
El funcionario advirtió que los camiones, en lo particular, “tienen más de 30 años de antigüedad y son de segundo o tercer uso, porque son vehículos que ya fueron utilizados en San Luis Potosí, Aguascalientes y Guanajuato u otros estados. La mayor parte del transporte es obsoleto”.
“El problema está en todos lados”, insistió. Agregó que hay una crisis de falta de choferes porque “no es atractivo el trabajo”, lo que genera incumplimientos porque los concesionarios no tienen personal. Esto, mencionó, es una de las principales fallas en lugares con mayor demanda, como Guadalupe.
La apuesta: Platabús
En agosto de 2019, la Secretaría de Desarrollo Urbano, Vivienda y Ordenamiento Territorial (Seduvot) presentó el proyecto Platabús, como la apuesta a un cambio cultural, de educación urbana y vial para la ciudad de Zacatecas.
En 2012, explicaron, nació el proyecto con el Plan Integral de Movilidad Urbana Sustentable, en el cual se analizaron accesos carreteros, actividades de la ciudadanía, sus puntos de interés, estado físico de las vialidades para conocer la capacidad del concreto, aforos vehiculares y peatonales.
A casi a cuatro años de dar a conocer el proyecto del Platabús, que considera una inversión global de 2 mil millones de pesos, solo existe un 48 por ciento de avance en la construcción de las terminales y esperan que se concluyan en diciembre.
Hasta el momento se han invertido 223 millones de pesos, de acuerdo con José Luis de la Peña Alonso, secretario de Seduvot.