ZACATECAS. El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) Zacatecas, promueve la lactancia materna de manera permanente en sus unidades médicas y hospitales por ser la primera vacuna que recibe un recién nacido.
La lactancia no representa costo extra, no requiere de preparación, está lista en el momento que el bebé requiere ser alimentado, es inocua, segura y siempre a la temperatura correcta.
En el marco de la Semana Mundial de la Lactancia Materna, María del Sol Magallanes Castillo, responsable estatal del programa de salud reproductiva, destacó el compromiso del Instituto durante todo el año para realizar acciones de difusión, concientización y movilizar a la sociedad en la práctica de lactancia materna.
Puntualizó que, por instrucciones del director general, Pedro Zenteno Santaella, se implementan mecanismos que promueven y garantizan el derecho a la salud de las mujeres: “Es un derecho universal que toda madre debe tener de manera absoluta”.
Detalló que la Organización Mundial de la Salud (OMS) subraya que la lactancia materna es una de las formas más eficaces de procurar la salud y supervivencia de niñas y niños.
Además, la leche materna es el alimento ideal, ya que es segura, limpia y contiene anticuerpos que protegen de muchas enfermedades propias de la infancia, suministrando toda la energía y nutrientes que necesitan durante los primeros seis meses de vida.
Asimismo, continúa aportando la mitad, o más, de las necesidades nutricionales hasta el primer tercio del segundo año.
En su mensaje, Magallanes Castillo, subrayó que en las Unidades de Medicina Familiar es donde se inicia la promoción de la lactancia materna como la alimentación exclusiva para el recién nacido.
Invitó a las mujeres a ser parte activa al fomentar la lactancia ya que son ellas quienes viven la experiencia física. Sin embargo, eso no excluye a los hombres, quienes forman parte de la red de apoyo.
El ISSSTE Zacatecas refrenda su compromiso de mejorar las condiciones para que mujeres, niñas y adolescentes derechohabientes accedan al bienestar y la salud sin discriminación, desde una perspectiva de derechos humanos, y de impulsar la cultura de autonomía y autocuidado en estos grupos prioritarios, concluyó Magallanes Castillo.