Derechos Humanos para las personas adultas mayores
En la actualidad, la población mundial experimenta un rápido envejecimiento, lo que destaca la necesidad de abordar de manera integral los derechos humanos de las personas adultas mayores, puesto que a medida que la longevidad aumenta, es esencial garantizar que esta parte de la sociedad disfrute de una vida plena y respetuosa de sus derechos fundamentales.
Es primordial destacar la importancia de proteger y promover los derechos humanos de las personas mayores, analizar cuáles son los principales desafíos que enfrentan para mejorar su calidad de vida.
Uno de los principios fundamentales de los derechos humanos es el derecho a la dignidad, y las personas adultas mayores no son una excepción. A menudo, estas personas enfrentan discriminación por su edad, lo que puede manifestarse en formas sutiles, pero perjudiciales, como la exclusión social o la falta de acceso a servicios básicos.
Es crucial fomentar una cultura que respete y valore la contribución continua de las personas mayores a la sociedad, garantizando que disfruten de una vida sin discriminación; de igual forma la salud es un componente vital de la calidad de vida, y las personas mayores tienen derecho a disfrutar del más alto nivel posible de salud física y mental. Sin embargo, a menudo enfrentan barreras en el acceso a servicios de salud adecuados, así como a programas de prevención y atención.
Es imperativo que los gobiernos y las comunidades trabajen juntos para garantizar que las personas mayores tengan acceso a servicios de salud de calidad y a programas que promuevan un envejecimiento saludable y activo.
La participación plena en la sociedad es esencial para el bienestar emocional y social de las personas mayores. Garantizar que tengan acceso a oportunidades de participación, ya sea a través de actividades recreativas, educación continua o participación en decisiones comunitarias, es fundamental.
Además, se deben eliminar las barreras arquitectónicas y tecnológicas que limitan la participación activa de las personas mayores en la vida cotidiana, crear un entorno que responda a las necesidades específicas de las personas mayores es esencial para garantizar su bienestar. Esto incluye la adaptación de espacios públicos, transporte accesible y viviendas adecuadas.
Asimismo, se deben implementar políticas que aborden la seguridad económica de las personas mayores, asegurando pensiones justas y acceso a servicios sociales que les permitan envejecer con dignidad.
La protección de los derechos humanos de las personas adultas mayores es una responsabilidad compartida que involucra a gobiernos, comunidades y a la sociedad en su conjunto. Abordar estos derechos no solo mejora la calidad de vida de las personas mayores, sino que también enriquece a toda la sociedad al reconocer y valorar la contribución continua de esta parte de la población.
Es necesario promover políticas y prácticas que reflejen un compromiso genuino con la dignidad, la inclusión y el bienestar de las personas mayores, construyendo así una sociedad que envejece de manera justa y respetuosa.
Todos los derechos para todas las personas.
*Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Zacatecas (CDHEZ)