ZACATECAS. El pasado jueves se realizó una reunión en la que cinco menores podrían ser adoptados, aunque existen complicaciones al momento de acoger a niños mayores de siete años, porque la mayoría de las parejas expresan el deseo de tener a bebés de entre los cero meses a dos años y muy pocos presentan interés en los más grandes.
La mesa de adopción se extendió por lo menos seis horas, pues se tuvo que analizar 110 expedientes de los cuales se redujo a tres, porque los niños en adopción eran menores de siete años, informó la presidenta honorífica del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (SEDIF), Sara Hernández Campa.
Puntualizó que la siguiente complicación es que los padres adoptantes quieren un menor sano, “no quieren uno enfermo o a uno con una discapacidad y entonces se reduce nuevamente las posibilidades de adoptar”.
SITUACIÓN LEGAL, OTRO OBSTÁCULO
La presidenta honorífica del SEDIF agregó que el trámite que no permite que haya más adopciones es la situación legal del menor, porque no todos están liberados jurídicamente.
“He hablado con el presidente magistrado [Arturo Nahle García] para que nos agilicen ese tipo de trámites porque tenemos que buscar en los rincones del estado, por medio de exhortos, algún familiar de forma directa”, explicó Hernández Campa.
Expresó que es una situación complicada porque, a veces incluso, se tienen que separar a los hermanos por diversas situaciones.
Ejemplificó que en esta ocasión hay un dilema porque existe el caso de dos hermanos, en el que uno de ellos tiene discapacidad y no se sabe cómo reaccionarán los adoptantes ante la notificación de que aprobaron para la adopción de un menor con esta condición.
Señaló que en la Casa Hogar para jóvenes habitan alrededor de seis niños con alguna discapacidad y en la Casa Cuna otros seis.