VETAGRANDE. El municipio está de fiesta, luego de que la imagen del Cristo Crucificado fue colocada en el Templo de Nuestra Señora de Guadalupe, después de que fuera restaurado por el Centro Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) Zacatecas cuando se dañó hace más de ocho años.
El 30 de marzo de 2015, la comunidad religiosa dio aviso al instituto sobre el desplome de la imagen que fue elaborada entre los siglos 16 y 18, la cual se encontraba en el Templo de San Juan Bautista.
Aquel día, la escultura, que estaba adosada a seis metros al muro testero, yacía en el suelo, mientras la cruz que lo sostenía continuaba en la pared y en ella, los brazos del Cristo, lo que hizo suponer que la imagen cedió durante la noche.
Restauradores del Área de Conservación del Centro INAH Zacatecas acudieron a la comunidad Vetagrande, del municipio del mismo nombre, e hicieron acopio de los fragmentos, los cuales trasladaron al Taller de Conservación y Restauración de la institución, donde comenzó el análisis de los materiales.
Lo anterior para hacer la restauración adecuada, aunque al realizarla se “llegó a la conclusión de que la manufactura de la escultura era atípica, pues presenta dos técnicas de fabricación antiguas: cuenta con un esqueleto de madera ligera, posiblemente colorín, el volumen del cuerpo lo brinda la pasta de caña, y el terminado final lo da una cobertura de cartón y papel amate”, informó el INAH en un comunicado.
REUBICACIÓN
El 3 de diciembre de 2023, la escultura fue devuelta a la localidad en medio de una gran fiesta, en la que el Cristo recorrió las calles del pueblo minero y donde un sinfín de devotos esperaban su llegada.
La imagen fue trasladada hasta Vetagrande por el personal del Centro INAH Zacatecas y desembalada a la entrada del municipio.
En peregrinación llevaron la pieza a la parroquia de San Juan Bautista, donde sufrió el siniestro, pero los restauradores del INAH señalaron que debido a las condiciones de humedad del templo no se podría quedar la imagen ahí.
Por lo anterior, solo se realizó una ceremonia en el templo y siguieron su recorrido las bandas de guerra de la Cofradía de San Juan Bautista de Vetagrande, danzas de matlachines y decenas de creyentes junto con el Cristo Crucificado.
La peregrinación continuó hasta el Templo de Nuestra Señora de Guadalupe, ubicado en el centro de la población, donde permanecerá la imagen, después de una misa de acción de gracias.