QUERÉTARO. A pesar del intenso frío que se dejó sentir en Ezequiel Montes, la plaza portátil registró tres cuartos de entrada, la cual se instaló este sábado en el recinto ferial, donde se conmemoró el aniversario 83 de la categoría de municipio libre a esta localidad queretana.
Se jugó una corrida de la ganadería de La Venta del Refugio, pasada de edad, que resultó muy complicada para los integrantes de este cartel, que a base de valor, esfuerzo y torería lograron cortar seis orejas.
Destacaron por su calidad los corridos en quinto y sexto lugar. Los rejoneadores Guillermo Hermoso de Mendoza y Tarik Othón lucieron cabalmente con rejones y banderillas, dejando ver su elevado dominio sobre sus cabalgaduras, además del oficio, valor y el buen momento por el que atraviesan sus carreras taurinas.
Ambos jinetes lograron cortar dos orejas a los segundos astados de sus lotes.
Gran jornada
El público quedó maravillado por la excelsa exhibición del toreo a caballo que mostraron ambos rejoneadores.
Tarik Othón estuvo a punto de indultar al segundo de su lote, quinto de la tarde, al que el juez de plaza se negó a perdonarle la vida pese a la sonora petición del público.
Tras la muerte de este toro, el ganadero José Luis Gómez dio triunfal vuelta al ruedo acompañado de su hijo.
Por su parte, el diestro Diego Silveti derrochó voluntad y esfuerzo toda la tarde; y ante un complicado astado logró arrancar muletazos de gran exposición, emocionando a los tendidos.
En su primero escuchó un aviso, y en su segundo cortó una oreja merced a una gran estocada.
El torero queretano, Diego San Román, tuvo que fajarse con sus ejemplares, y a base de valor y exposición también pudo salir con una oreja en la espuerta.
La cosecha pudo ser mayor, de no fallar con la espada con el segundo de su lote, con el que estuvo muy valiente.