ZACATECAS. En la visita del presidente Andrés Manuel López Obrador, un grupo de trabajadores de salud protestó por irregularidades en la entrega de basificaciones.
Denunciaron que entre 450 y 600 médicos y enfermeros quedaron fuera durante la transición del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) al IMSS-Bienestar.
Entre los afectados hay personal con antigüedad de hasta más de 10 años, mientras que hubo empleados con seis o incluso tres meses de labores que recibieron el beneficio.
Además, los manifestantes recordaron que fueron ellos quienes estuvieron en la primera línea de atención durante la pandemia de la COVID-19, “al pie del cañón” y arriesgando a su familia.
Por ello, reprocharon que se incumpliera el compromiso de López Obrador de que se les otorgarían bases, pero a cuatro años de distancia, esto no ha sucedido.
Aunque tienen prestación de seguridad ante el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), no han tenido puntaje para el Fovissste y se mantienen con contratos de 9 mil pesos.
A unos metros de donde el primer mandatario daba su mensaje, separados por una valla y varias filas de personas en el Palacio de Convenciones, los inconformes gritaban a coro: “¡Hubo corrupción en basificación!”.
Con pancartas se hicieron notar: “AMLO, aquí están tus héroes de la pandemia: sin base y sin capa”, “Sr. presidente, no nos ignore”.
Al finalizar el evento, Carlos Marcos Hernández Magallanes, titular del IMSS-Bienestar en Zacatecas, se acercó para dialogar con los trabajadores:
—De una vez reúnanos a los 600 —le exigían al funcionario.
—Vamos a hacer una cosa: voy unidad por unidad.
—Ya estamos todos aquí.
—Unidad por unidad, por fecha. Vamos un grupo con cinco personas de aquí —insistía Hernández.
—No, todos juntos.
Sin embargo, acordaron integrar una comisión de cuatro personas que hablarían con Adilene Rosales Romero, coordinadora de Programas para el Desarrollo en Zacatecas, quien aseguró que expondría la situación al presidente.