El lunes fue operado con éxito de la mano derecha el matador de toros hidrocálido Fermín Espinosa Armillita, tras la grave fractura que sufrió en el inicio de su temporada.
El 12 de enero en la Plaza de Toros de Arandas, Jalisco, recibió un fuerte golpe de la empuñadura de la espada, que le provocó esta lesión que al principio no parecía de gravedad.
El traumatólogo y ortopedista Ricardo González, quien lo intervino quirúrgicamente, calificó la operación como un procedimiento sin complicaciones.
Al matador le fue colocado un tornillo que se introdujo en el tercer metacarpiano (dedo medio de la mano derecha) haciendo una incisión por los nudillos, que ayudará a que la recuperación sea más rápida.
“Me siento bien, sobre todo anímicamente porque los planes del doctor son muy positivos y me dice que en cuatro o cinco semanas podría ya reanudar mis entrenamientos de salón y los tentaderos en el campo bravo, para no perder el ritmo que traía física y mentalmente.
“Asimismo retomar los proyectos para reaparecer en cuanto los tiempos del cuerpo se ajusten. Insisto en que son ‘gajes del oficio’ y yo tengo la convicción de recuperar el tiempo lo más pronto posible”, mencionó el matador después de despertar de la cirugía.
Armillita permanecerá hospitalizado a más tardar hoy y se enfocará en su recuperación para regresar lo más pronto a los tendidos.