GUADALUPE. Víctor Manuel Díaz y Manuela Carrillo son un ejemplo de que para el amor y para casarse no hay edad, ya que a sus 90 años contrajeron nupcias este Día del Amor y la Amistad en la tradicional ceremonia de Matrimonios Colectivos.
Los esposos relataron que desde 2009 vivían en concubinato y fue hasta este año que decidieron dar el siguiente paso y convertirse en marido y mujer.
“Queríamos casarnos desde hace unos años, pero nos daban nervios y al fin hoy se hizo realidad.
“Es una satisfacción muy bonita, porque nos amamos demasiado y queríamos sentir esa sensación [de casarnos]”, mencionaron.
Víctor Manuel dio a conocer que doña Manuela enviudó joven y producto de su anterior matrimonio concibió una hija, a quien ama como si fuera suya.
Con nerviosismo y asombro los adultos mayores unieron sus vidas en compañía de familiares y amigos, quienes participaron como testigos de este enlace matrimonial.
UNA GRAN RESPONSABILIDAD
En el evento de Matrimonios Colectivos contrajeron nupcias 90 parejas en el Pueblo Mágico.
El presidente municipal José Saldívar Alcalde refirió que el matrimonio es una gran responsabilidad, porque ahora serán el ejemplo para las generaciones que vienen detrás.
Expuso que la familia es el pilar más importante en la sociedad y de ello depende que continúen formándose personas de bien, con valores y sentido de la responsabilidad para formar personas de bien.
Por ello, exhortó a los nuevos esposos a que juntos formen un equipo para fortalecer a la familia y la formación de sus hijos, para quienes ya los tienen o los que quieren concebir.